1 SAMUEL 16
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IV. ASCENSO DE DAVID Y DECADENCIA DE SAÚL (16–31)#16.1–31.13 La siguiente sección comienza con la presentación de David y termina con el patético relato de la muerte de Saúl (cap. 31). En ella se enfrentan dos caracteres y dos destinos opuestos: David, que emprende una brillante y ascendente carrera, y Saúl, que se precipita cada vez más hacia su trágico fin. Junto a ellos aparece un tercer personaje: Jonatán, el amigo y aliado incondicional de David.
Samuel consagra rey a David
1El Señor dijo a Samuel:
–¿Hasta cuándo vas a estar triste por causa de Saúl? No quiero que siga siendo rey de Israel. Anda, llena de aceite tu cuerno, que quiero que vayas a la casa de Jesé, el de Belén, porque ya escogí como rey a uno de sus hijos.
2–¿Y cómo haré para ir? –respondió Samuel–. ¡Si Saúl llega a enterarse, me matará!
El Señor le contestó:
–Toma una ternera y di que vas a ofrecérmela en sacrificio. 3Después invita a Jesé al sacrificio, y yo te diré lo que debes hacer. Consagra como rey a quien yo te diga.
4Samuel hizo lo que el Señor le mandó. Cuando llegó a Belén, los ancianos de la ciudad#16.4 Ancianos de la ciudad: Véase 1 S 8.4 n. salieron a recibirle con cierto temor, y le preguntaron:
–¿Vienes en son de paz?
5–Así es –respondió Samuel–. Vengo a ofrecer un sacrificio al Señor. Purificaos#16.5 Purificaos: Cf. Ex 19.10; Jos 3.5. y acompañadme en el sacrificio.
Luego Samuel purificó a Jesé y a sus hijos, y los invitó al sacrificio. 6Cuando ellos llegaron, Samuel vio a Eliab y pensó: “Con toda seguridad, este es el hombre que el Señor ha escogido como rey.”
7Pero el Señor le dijo: “No te fijes en su apariencia ni en su elevada estatura, pues yo lo he rechazado. No se trata de lo que el hombre ve,#16.7 No se trata de lo que el hombre ve: La versión griega (LXX) y un ms. de Qumrán agregan como Dios ve. pues el hombre se fija en las apariencias. Yo me fijo en el corazón.”
8Entonces Jesé llamó a Abinadab y se lo presentó a Samuel, pero Samuel comentó:
–Tampoco a este ha escogido el Señor.
9Luego Jesé le presentó a Samá, pero Samuel dijo:
–Tampoco ha escogido a este.
10Jesé presentó a Samuel siete de sus hijos, pero Samuel tuvo que decirle que a ninguno de ellos lo había elegido el Señor. 11Finalmente le preguntó:
–¿No tienes más hijos?
–Falta el pequeño, que está cuidando el rebaño –respondió Jesé.
–Manda a buscarlo –dijo Samuel–, porque no comenzaremos la ceremonia hasta que él llegue.
12Jesé lo mandó llamar. Era un muchacho de piel sonrosada, agradable y bien parecido.#16.12 Bien parecido: Véase 1 S 9.2 n.
Entonces el Señor dijo a Samuel:
–Este es. Levántate y conságralo como rey.
13En seguida Samuel tomó el cuerno del aceite, y en presencia de sus hermanos consagró como rey al joven, que se llamaba David. A partir de aquel momento, el espíritu del Señor se apoderó de él.#16.13 El espíritu del Señor se apoderó de él: En 1 S 10.6,10 se dice lo mismo de Saúl. La expresión a partir de aquel momento indica que el espíritu del Señor estaba presente en David de forma permanente. Después Samuel se despidió y se fue a Ramá.
David al servicio de Saúl
14Entre tanto, el espíritu del Señor se había apartado de Saúl, y un espíritu maligno enviado por el Señor le atormentaba. 15Los que estaban a su servicio le dijeron:
–Como ves, señor nuestro, un espíritu maligno de parte de Dios te está atormentando. 16Por eso, ordena a estos tus servidores que busquen a alguien que sepa tocar el arpa, para que, cuando te ataque el espíritu maligno, él toque el arpa y tú te sientas mejor.
17–Pues buscad a alguien que sepa tocar bien, y traédmelo –contestó Saúl.
18Entonces uno de ellos dijo:
–Yo he visto a uno de los hijos de Jesé, el de Belén, que sabe tocar muy bien. Además es un guerrero valiente y habla con sensatez; es bien parecido y cuenta con la ayuda del Señor.
19Entonces Saúl mandó mensajeros a Jesé, a decirle: “Envíame a tu hijo David, el que cuida las ovejas”; 20y Jesé envió su hijo David a Saúl. Y con él envió a Saúl un asno cargado de pan, un odre de vino y un cabrito. 21Así David se presentó ante Saúl y quedó a su servicio; y Saúl llegó a estimarle muchísimo, y le nombró su ayudante. 22Y envió Saúl un mensaje a Jesé, rogándole que dejara a David con él, porque le había agradado mucho.#16.22 Agradado mucho: En estos caps. se hace resaltar el hecho de que David era querido por todos (cf. 18.1,5,16,28; 20.17). 23Así que, cuando el espíritu maligno de parte de Dios atacaba a Saúl, David tomaba el arpa y comenzaba a tocar. Con eso, Saúl recobraba el ánimo y se sentía mejor, y el espíritu maligno se apartaba de él.
Actualmente seleccionado:
1 SAMUEL 16: DHHE
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