2 REYES 13:14-25
2 REYES 13:14-25 DHHE
Eliseo estaba enfermo de muerte, y Joás, rey de Israel, fue a verle, y lloró y le abrazó, diciendo: –¡Padre mío, padre mío, que has sido para Israel como un poderoso ejército! Eliseo le dijo: –Toma un arco y algunas flechas. El rey tomó un arco y unas flechas. Entonces Eliseo le dijo: –Prepárate a disparar una flecha. Mientras el rey hacía esto, Eliseo puso sus manos sobre las del rey y le dijo: –Abre la ventana que da al oriente. El rey la abrió, y Eliseo le ordenó: –Ahora, ¡dispara! Y el rey disparó la flecha. Entonces Eliseo exclamó: –¡Flecha salvadora del Señor! ¡Flecha salvadora contra Siria! ¡Tú vas a derrotar a los sirios en Afec, y acabarás con ellos! Después le dijo al rey: –Toma las flechas. Al tomarlas el rey, Eliseo le ordenó: –Ahora golpea el suelo. El rey golpeó el suelo tres veces, y se detuvo. Entonces el profeta se enojó con él y le dijo: –Si hubieras golpeado el suelo cinco o seis veces, habrías podido derrotar a los sirios hasta acabar con ellos; pero ahora los derrotarás sólo tres veces. Eliseo murió, y lo enterraron. Por entonces, año tras año, bandas de ladrones moabitas invadían el país. Y en cierta ocasión en que unos israelitas estaban enterrando a un hombre, al ver llegar a una de aquellas bandas arrojaron al muerto dentro de la tumba de Eliseo y se fueron. Pero tan pronto el muerto rozó los restos de Eliseo, resucitó y se puso en pie. Hazael, rey de Siria, oprimió a Israel mientras Joacaz vivió. Pero el Señor tuvo misericordia y compasión de ellos, y por causa de su pacto con Abraham, Isaac y Jacob puso su atención en ellos y no quiso destruirlos ni arrojarlos de su presencia. Y hasta ahora no lo ha hecho. Cuando Hazael, rey de Siria, murió, reinó en su lugar su hijo Ben-hadad. Entonces Joás, hijo de Joacaz, rescató del poder de Ben-hadad las ciudades que este había quitado en la guerra a Joacaz, su padre. Y derrotó Joás a Ben-hadad tres veces, y recuperó las ciudades de Israel.