EZEQUIEL 3:1-9
EZEQUIEL 3:1-9 DHHE
Entonces me dijo: “Tú, hombre, cómete este escrito y ve luego a hablarle a la nación de Israel.” Abrí la boca y él me hizo comer el escrito. Luego me dijo: “Trágate ahora este escrito que te doy y llena con él tu estómago.” Me lo comí, y me supo tan dulce como la miel. Entonces me dijo: “Ve y comunica al pueblo de Israel lo que tengo que decirle. Yo no te envío a un pueblo que habla una lengua complicada o difícil de entender, sino al pueblo de Israel. No te envío a naciones numerosas que hablan idiomas complicados o difíciles, que no entenderías. Aunque, si yo te enviara a esos pueblos, ellos te harían caso. En cambio, el pueblo de Israel no querrá hacerte caso, porque no quiere hacerme caso a mí. Todo el pueblo de Israel es terco y de cabeza dura. Pero yo voy a hacerte tan obstinado y terco como ellos. Voy a hacerte duro como el diamante, más duro que la piedra. No les tengas miedo ni te asustes ante el gesto de su cara, por muy rebeldes que sean.”