ISAÍAS 1:21-31
ISAÍAS 1:21-31 DHHE
¡Cómo has llegado, ciudad fiel, a ser lo mismo que una prostituta! Antes toda tu gente actuaba con justicia y vivía rectamente, pero ahora no hay más que asesinos. Eras plata y te has convertido en basura, eras buen vino y te has vuelto agua. Tus gobernantes son rebeldes y amigos de bandidos. Todos se dejan comprar con dinero y buscan que les hagan regalos. No hacen justicia al huérfano ni les importan los derechos de la viuda. Por eso, el Señor todopoderoso, el Poderoso de Israel, afirma: “¡Basta! Yo ajustaré las cuentas a mis enemigos. Me vengaré de ellos. Voy a levantar de nuevo mi mano contra ti y a quemar por completo tu basura; voy a limpiarte de toda tu impureza. Haré que vuelvas a tener jueces como antes y consejeros como los del principio. Después que yo lo haya hecho, volverán a llamarte ‘Ciudad de justicia’, ‘Ciudad fiel’. Con mi justicia y acción salvadora liberaré a los habitantes de Sión que se vuelvan a mí; pero haré pedazos a los rebeldes y pecadores, y los que me abandonen morirán. Entonces os avergonzaréis de esas encinas y jardines que tanto os gustan, donde dais culto a los ídolos. Y seréis como encina de hojas marchitas; os semejaréis a un jardín sin agua. El hombre fuerte se convertirá en paja, y sus obras en chispa: los dos arderán al mismo tiempo y no habrá quien los apague.”