NÚMEROS 22:30-34
NÚMEROS 22:30-34 DHHE
Pero el asna le dijo: –Yo soy el asna que tú has montado toda tu vida, y bien sabes que nunca me he portado así contigo. –Es verdad –respondió Balaam. Entonces el Señor hizo que Balaam viera a su ángel, que estaba en medio del camino con una espada en la mano. Balaam se inclinó hasta tocar el suelo con la frente, y el ángel del Señor le dijo: –¿Por qué pegaste tres veces a tu asna? Yo soy quien ha venido a cerrarte el paso, porque tu viaje me disgusta. El asna me vio, y me esquivó las tres veces. Si no me hubiera esquivado, ya te habría yo matado, aunque a ella la habría dejado con vida. Balaam respondió al ángel del Señor: –He pecado, pues no sabía que eras tú quien estaba ahí cerrándome el camino. Si te parece mal que vaya, regresaré.