FILIPENSES 3:1-4
FILIPENSES 3:1-4 Reina Valera 2020 (RV2020)
Por lo demás, hermanos, gozaos en el Señor. A mí no me molesta escribiros las mismas cosas que ya os he escrito, y para vosotros es útil. Guardaos de los perros, guardaos de los malos obreros, guardaos de los que mutilan el cuerpo. Nosotros somos los que tenemos la verdadera circuncisión, los que en espíritu servimos a Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, y no ponemos nuestra confianza en esfuerzos humanos. Aunque también yo tengo de qué confiar en los méritos humanos. Si alguno piensa que tiene de qué confiar en lo que ha hecho, yo más
FILIPENSES 3:1-4 La Palabra (versión española) (BLP)
Por lo demás, hermanos míos, alegraos en el Señor. No me molesta escribiros las mismas cosas, si a vosotros os proporciona seguridad. ¡Ojo con esos perros, con esos perversos agitadores, con esos que se empeñan en mutilarse! ¡Nosotros somos los auténticos circuncidados! ¡Nosotros los que ofrecemos un culto nacido del Espíritu divino! ¡Nosotros los que estamos orgullosos de Cristo Jesús y no hemos puesto en algo humano nuestra confianza! Y eso que yo tengo buenas razones, muchas más que cualquier otro, para poner mi confianza en lo humano
FILIPENSES 3:1-4 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Ahora, hermanos míos, alegraos en el Señor. Para mí no es ninguna molestia repetiros lo ya escrito, y para vosotros es útil. Guardaos de esa gente despreciable, de esos que hacen el mal, de esos que mutilan el cuerpo. Porque los verdaderos circuncidados somos nosotros, los que adoramos a Dios movidos por su Espíritu, los que nos gloriamos de ser de Cristo Jesús y no ponemos nuestra confianza en cosas externas. Aunque también yo tengo razones para confiar en esas cosas. Nadie tendría más razones que yo para confiar en ellas
FILIPENSES 3:1-4 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Por lo demás, hermanos míos, alegraos en el Señor. Para mí no es molestia volver a escribiros lo mismo, y a vosotros os da seguridad. Cuidaos de esos perros, cuidaos de esos que hacen el mal, cuidaos de esos que mutilan el cuerpo. Porque la circuncisión somos nosotros, los que por medio del Espíritu de Dios adoramos, nos enorgullecemos en Cristo Jesús y no ponemos nuestra confianza en esfuerzos humanos. Yo mismo tengo motivos para tal confianza. Si cualquier otro cree tener motivos para confiar en esfuerzos humanos, yo más