La Alegría Y El Gozo De Vivir en Su PresenciaMuestra

"¿Qué te pones en la cara para que brilles así?"

A estas alturas tal vez te preguntes: ¿Cómo puedo obtener el gozo de Cristo? Lo primero es permitiéndole a Jesucristo ser el Señor de tu vida:“Ustedes me llaman Maestro y Señor, y tienen razón, porque soy Maestro y Señor" (Jn.13:13, Ap. 3:20).

Otra forma en la que se manifiesta el gozo de Cristo es cuando leemos las Escrituras y aceptamos la verdad, permitiendo que el Espíritu Santo obre en nuestro corazón, esto es lo que las escrituras denominan: “Tener el corazón ardiendo” como resultado de estar con Jesucristo y oírle: Los dos se dijeron: «¿No es verdad que, cuando él nos hablaba en el camino y nos explicaba la Biblia, sentíamos como que un fuego ardía en nuestros corazones?» (Lc.24:32).

Someterse a la voluntad de Dios, también es otra forma de experimentar, vivir el gozo que Dios promete en Su palabra. Lucas 10:21 nos dice que Jesús se sometía completamente a la voluntad de Su Padre y esto le producía mucho gozo.

Santiago define el gozo en el reino de Dios como un regalo, algo que no tiene nada que ver con eliminar las circunstancias externas negativas, sino con aceptarlas como oportunidades para fortalecer la fe y ganar firmeza de carácter(Stg. 1:2-4).

Hay una historia que me encanta: Un mercader que recorría el mundo, en Corea del Sur le preguntó a un misionero brasileño: "¿Qué te pones en la cara para que brilles de esta forma?" Marcelo respondió: “Yo no me pongo nada”. “Sí, lo haces”, dijo el comerciante. “Todos ustedes lo hacen. Lo he visto en Estambul, en Río, en Bombay, en Colombia, en Australia”. "Todos los que dicen seguir a un tal Jesús se ponen algo para brillar”. Marcelo se río y su rostro brilló aún más cuando dijo: “Te diré qué es lo que hace que mi rostro brille. Es el amor, el gozo y la presencia de Cristo ardiendo en mi corazón, quien me da alegría”.

Todos tendremos días buenos y malos. Todos experimentaremos los altibajos de la vida. Pero lo que nada, ni nadie nos podrá quitar es el gozo de Cristo, ardiendo en nuestro interior.

La pregunta es: ¿Qué refleja tu rostro a los demás? ¿Qué comunica tu actitud acerca de tu fe?

Queremos darte las gracias, querido lector, por completar este plan devocional. Oramos por ti y nuestro deseo de corazón es que haya sido de bendición para tu vida.

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Con amor en Cristo,

Pr, Juan Carlos Calle y Equipo Conectar Global.