Devocional del día | EneroMuestra

Fidelidad de Dios

Pasaje central: Génesis 28:10-13

Y salió Jacob de Beerseba, y fue para Harán. Y llegó a cierto lugar y pasó la noche allí, porque el sol se había puesto; tomó una de las piedras del lugar, la puso de cabecera y se acostó en aquel lugar. Y tuvo un sueño, y he aquí, había una escalera apoyada en la tierra cuyo extremo superior alcanzaba hasta el cielo; y he aquí, los ángeles de Dios subían y bajaban por ella. Y he aquí, el Señor estaba sobre ella, y dijo: Yo soy el Señor, el Dios de tu padre Abraham y el Dios de Isaac. La tierra en la que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia.

Recordando la historia, Isaac tenía dos hijos llamados Esaú y Jacob, el padre de ambos ya era un hombre anciano cuando decide dar la bendición a su hijo primogénito que en este caso es Esaú, sin embargo, la madre de ellos tenía preferencia por Jacob y lo persuadió a tomar el lugar de Esaú para que recibiera la bendición que por ley le correspondía a su hermano, ocasionando con ello la ira en Esaú, provocando con ello que Jacob huyera de su hogar para preservar su vida.

Cuando llegó la noche Jacob tomó unas piedras del lugar y las puso de cabecera y se acostó, al dormir tuvo un sueño en donde vio que había una escalera apoyada en la tierra cuyo extremo superior alcanzaba hasta el cielo; y he aquí, los ángeles de Dios subían y bajaban por ella. Y he aquí, el Señor estaba sobre ella, y dijo: Yo soy el Señor, el Dios de tu padre Abraham y el Dios de Isaac. La tierra en la que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia.

Era Dios mismo mostrándose ante Jacob como su protector y proveedor. Nuestro Dios es un Dios generacional, por cuanto le mencionó Yo soy el Señor, el Dios de tu padre Abraham y el Dios de Isaac.

Y a pesar de la soledad en la que se encontraba en ese momento Jacob, Dios les dijo: La tierra en la que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia.

Puede ser que en este momento te encuentres en medio de la dificultad, sin embargo, debes recordar que Dios ha prometido nunca dejarnos ni jamás desampararnos.

Medita: ¿Tu corazón descansa en la fidelidad de Dios?