La Vida EternaMuestra

¿Qué es la vida eterna?

Jesús dice en Juan 3:16: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna".

¿De qué vida eterna habla Jesús aquí?

Muchos piensan que se refiere a tener vida eterna con Dios. Aunque este versículo efectivamente enseña que no nos perderemos, significa mucho más que seguir viviendo después de la muerte y nunca dejar de existir.

La verdad es que los seres humanos somos seres eternos. Cuando morimos físicamente, nuestra alma y nuestro espíritu simplemente seguirán viviendo (Eclesiastés 12:7). Lo que esto significa es que no es necesario ser salvo para recibir la vida eterna. Todos, creyentes o incrédulos, siguen viviendo para siempre.

Sin embargo, la pregunta es: ¿Dónde se vive para siempre? ¿En la presencia de Dios (el cielo) o en las tinieblas más oscuras donde Dios no está (el infierno)?

Por tanto, "vida eterna" significa algo más.

Jesús dice en Su Oración Sacerdotal en Juan 17:3: "Y esta es la vida eterna: que te conozcan a Ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado".

Puedes ser perdonado de todos tus pecados, puedes ser salvo por la eternidad, pero ese no es el único propósito por el cual Dios dio a Su Hijo unigénito.

Jesús vino para que tengas vida eterna: una vida en la que conozcas a Dios de una manera íntima y personal. Él quiere ser tu Padre y tú eres su hijo o hija (2 Corintios 6:18).

Dios quiere que le conozcas como un Padre amoroso y misericordioso. Alguien en quién puedes confiar. Uno con el que siempre puedes contar y que nunca te abandonará.
Un Padre que nunca se enfada contigo, no te condena ni te rechaza, sino que siempre cree en ti. Que es amor incondicional, no importa de dónde vengas, lo que hiciste y no debiste haber hecho, o lo que no hiciste pero debiste haber hecho. Un Padre con los brazos abiertos para recibirte y amarte.

Esa es la vida eterna de la que habla Jesús: que llegues a conocer a Dios, el Padre, y a su Hijo Jesucristo, además de que vivirás eternamente con Dios.

Tal vez te preguntes: ¿Y cómo puedo llegar a conocer a Dios Padre de esa manera? De eso hablaremos mañana.