¡Levántate! 7 Claves Para Levantarte Y Seguir.

La Gracia. 7 Claves Para Vivir en Plenitud.

Confiando en Los Propósitos De Dios

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 <div class="book bkTIT">
 <div class="chapter ch1" data-usfm="TIT.1">
 <div class="label">1</div><div class="ms2">Introducci&#243;n (1,1-4)</div><div class="s1">Saludo</div><div class="p"> 1Pablo, siervo de Dios y ap&#243;stol de Jesucristo para conducir a los elegidos de Dios a la fe y al conocimiento de la verdad que se manifiesta en un culto viviente#Rm 1,1; 1 Co 1,1; Flp 1,1; Stg 1,1; 2 Pe 1,1; Jds 1; 1 Tm 2,4; 2 Tm 2,25; 3,7. 2y se apoya en la esperanza de la vida eterna. Dios, que no miente, prometi&#243; esa vida desde la eternidad, 3y ahora, en el tiempo prefijado, ha hecho p&#250;blica su palabra confi&#225;ndome la misi&#243;n de proclamarla seg&#250;n el mandato de Dios, nuestro Salvador.#Rm 5,6; Ga 4,4; 1 Tm 2,6; 6,15; Rm 16,25-26; Ef 3,5; Col 1,26; 1 Tm 1,11.</div><div class="p"> 4A Tito, verdadero hijo m&#237;o en una fe compartida, gracia y paz de parte de Dios nuestro Padre y de Cristo Jes&#250;s, nuestro Salvador.#2 Co 2,13; Ga 2,1-3; 1 Tm 1,2.</div><div class="ms1">I. Normas para la elecci&#243;n de responsables en la iglesia (1,5-9)</div><div class="s1">Elecci&#243;n de responsables</div><div class="p"> 5La raz&#243;n por la que te dej&#233; en Creta fue para que terminases de organizar los asuntos pendientes y para que nombraras presb&#237;teros en cada ciudad, de acuerdo con las instrucciones que te di. 6El elegido ha de ser irreprochable, marido de una sola mujer; sus hijos, si los tiene, deben ser creyentes sin que puedan ser acusados de libertinos o rebeldes.#1 Tm 3,2-7; 2 Tm 2,24.</div><div class="p"> 7Es preciso, en efecto, que el obispo, en cuanto encargado de administrar la casa de Dios, sea irreprochable. No ha de ser arrogante, ni col&#233;rico, ni aficionado al vino, ni pendenciero, ni amigo de negocios sucios. 8Al contrario, debe ser hospitalario, amante del bien, sensato, de vida recta, piadoso y due&#241;o de s&#237;. 9Debe estar firmemente anclado en la verdadera doctrina, de modo que sea capaz tanto de aconsejar en lo que respecta a la autenticidad de la ense&#241;anza como de rebatir a quienes la combaten.#2,1; 1 Tm 1,10; 2 Tm 4,3 (ver 1 Tm 4,6; 6,3).</div><div class="ms1">II. Falsos maestros y falsas doctrinas (1,10-16)</div><div class="s1">Propagadores de falsas doctrinas</div><div class="p"> 10Porque hay muchos rebeldes, charlatanes y embaucadores, sobre todo entre los jud&#237;os convertidos. 11Y es preciso reducirlos al silencio porque no hacen m&#225;s que ir de casa en casa causando estragos y ense&#241;ando lo que no deben en busca de una vil ganancia.#Jn 10,12; 2 Tm 3,6; 4,2; 1 Pe 5,2-3. 12Ya dijo de ellos uno de sus propios poetas:</div><div class="b"></div><div class="q">&#171;Los cretenses son siempre mentirosos,</div><div class="q">malas bestias, glotones y perezosos&#187;.</div><div class="b"></div><div class="p"> 13Y dijo la verdad. Por eso, corr&#237;gelos con severidad a fin de que se mantengan fuertes en la fe. 14Que no se ocupen de f&#225;bulas jud&#237;as ni de preceptos humanos alejados de la verdad.#1 Tm 1,4; 4,1-7. 15Todo es limpio para los que viven limpiamente; todo es sucio, en cambio, para los manchados y los incr&#233;dulos, pues tienen manchadas su mente y su conciencia.#Mt 15,11.18-20; Lc 11,39-41; Rm 14,20. 16Dicen que conocen a Dios, pero sus obras lo desmienten, ya que son odiosos, obstinados e incapaces de hacer algo bueno.</div>
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 <div class="chapter ch2" data-usfm="TIT.2">
 <div class="label">2</div><div class="ms1">III. Recta conducta cristiana y sus fundamentos (2,1&#8211;3,7)</div><div class="s1">Deberes de los diferentes estados</div><div class="p"> 1Por tu parte, ense&#241;a en conformidad con la aut&#233;ntica doctrina.#1,9. 2Que los ancianos sean sobrios, serios y prudentes; que vivan con autenticidad la fe, la paciencia y el amor.#2 Ts 1,3-4; 1 Tm 6,11. 3Y las ancianas lo mismo: que se comporten como corresponde a creyentes; que no sean calumniadoras ni esclavas del vino, sino maestras de bondad.#1 Tm 3,11. 4Ense&#241;ar&#225;n as&#237; a las j&#243;venes a ser esposas y madres amantes, 5a ser sensatas y castas, a cuidar con esmero de su casa, a ser bondadosas y respetuosas con sus maridos para que nadie pueda hablar mal de la palabra de Dios.#Ef 5,22; Col 3,18.</div><div class="p"> 6Exhorta igualmente a los j&#243;venes a ser equilibrados, 7present&#225;ndote t&#250; mismo en todo como un modelo de buena conducta. S&#233; &#237;ntegro en la ense&#241;anza, serio en el comportamiento,#1 Tm 4,12; 1 Pe 5,3. 8aut&#233;ntico e irreprochable en el hablar. De ese modo el enemigo quedar&#225; en evidencia al no tener nada malo que decir contra nosotros.#1 Pe 2,15.</div><div class="p"> 9Que los esclavos respeten siempre la autoridad de sus amos y traten de agradarlos. Que no los contradigan#Ef 6,5; Col 3,22; 1 Tm 6,1; 1 Pe 2,18. 10ni los enga&#241;en. Al contrario, que les profesen una perfecta y plena fidelidad para as&#237; honrar en cualquier circunstancia la ense&#241;anza recibida de Dios, nuestro Salvador.</div><div class="s1">Jesucristo como fundamento de nuestra salvaci&#243;n</div><div class="p"> 11Se ha hecho, en efecto, visible la bondad de Dios, que trae la salvaci&#243;n a toda la humanidad, 12ense&#241;&#225;ndonos a renunciar a la impiedad y a las pasiones desordenadas de este mundo, y a vivir desde ahora de una manera sobria, recta y fiel a Dios,#1 Jn 2,16. 13mientras aguardamos el feliz cumplimiento de lo que estamos esperando: la manifestaci&#243;n gloriosa del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo. 14Fue &#233;l quien se entreg&#243; por nosotros a fin de liberarnos de toda maldad y de prepararse un pueblo limpio y elegido, totalmente entregado a la pr&#225;ctica del bien.#Dt 4,20; 7,6; 14,2; Ga 1,4; 2,20; 1 Tm 2,6; Ef 2,10; 1 Pe 2,9; 3,13. 15Esto es lo que tienes que ense&#241;ar, aconsejar y defender con toda autoridad. Y que nadie te haga de menos.#1 Tm 4,12.</div>
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 <div class="book bkTIT">
 <div class="chapter ch3" data-usfm="TIT.3">
 <div class="label">3</div><div class="s1">La conducta de los creyentes</div><div class="p"> 1Recuerda a los creyentes que deben someterse a las autoridades que gobiernan: que las obedezcan y est&#233;n prontos a colaborar en todo lo bueno que emprendan;#Rm 13,1-7; 1 Pe 2,13. 2que no ofendan a nadie ni se peleen con nadie; que se muestren afables y llenos de dulzura con todo el mundo.#1,7; 1 Tm 3,3; 2 Tm 2,24.</div><div class="p"> 3Porque tambi&#233;n nosotros en otro tiempo fuimos irreflexivos y obstinados; anduvimos descarriados, esclavos de toda suerte de pasiones y placeres, y vivimos en la maldad y la envidia, odiados de todos y odi&#225;ndonos unos a otros.#1 Co 6,10-11; Ef 2,2-4; 5,8; 1 Pe 4,3. 4Pero ahora se han hecho patentes la bondad y el amor que Dios, nuestro Salvador, tiene a los seres humanos. 5&#201;l nos ha salvado no en virtud de nuestras buenas obras, sino por su misericordia; y lo ha hecho por medio del lavamiento que nos hace nacer de nuevo y por medio de la renovaci&#243;n del Esp&#237;ritu Santo#Ef 2,8-9; 5,26; 2 Tm 1,9; Jn 3,5. 6que Dios ha derramado sobre nosotros con abundancia a trav&#233;s de nuestro Salvador Jesucristo.#Jl 3,1-5; Hch 2,4.16-18; 11,15-16. 7Justificados as&#237; por la gracia de Dios, hemos sido constituidos herederos con la esperanza de recibir la vida eterna.</div><div class="ms1">IV. Consejos particulares a Tito (3,8-11)</div><div class="s1">Consejos a Tito</div><div class="p"> 8Es esta una palabra digna de cr&#233;dito y quiero que tambi&#233;n t&#250; insistas con tes&#243;n en ella para que, cuantos creen en Dios se apliquen con entusiasmo a la pr&#225;ctica del bien. Esto es bueno y &#250;til para todos.#1 Tm 1,15; 3,1; 4,9; 2 Tm 2,11. 9Evita, en cambio, las controversias est&#250;pidas sobre genealog&#237;as, as&#237; como las acaloradas pol&#233;micas en torno a la ley; son insustanciales y no conducen a nada.#2 Tm 2,14.16.23. 10Ap&#225;rtate de quien fomenta divisiones despu&#233;s de haberlo amonestado una e incluso dos veces,#Mt 18,15-17. 11pues ya ves que se trata de una persona descarriada y pecadora a la que su propia conciencia condena.</div><div class="ms2">Conclusi&#243;n (3,12-15)</div><div class="s1">&#218;ltimas recomendaciones y saludos</div><div class="p"> 12Pienso enviarte a Artemas y a T&#237;quico. En cuanto lleguen, ven enseguida a encontrarte conmigo en Nic&#243;polis, pues he decidido pasar all&#237; el invierno. 13Preoc&#250;pate de que a Zen&#243;n, el abogado, y a Apolo nada les falte para su viaje. 14Que nuestros hermanos aprendan a ser los primeros en la pr&#225;ctica del bien, ayudando en las necesidades m&#225;s apremiantes, para que no sea su vida como un &#225;rbol sin frutos.#2,14; Ef 4,28.</div><div class="p"> 15Te saludan todos los que est&#225;n conmigo. Saluda a nuestros amigos en la fe. Que la gracia est&#233; con todos vosotros.</div>
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 <div class="book bkPHM">
 <div class="chapter ch1" data-usfm="PHM.1">
 <div class="label">1</div><div class="s1">Saludo</div><div class="p"> 1Pablo, encarcelado por causa de Cristo, y el hermano Timoteo, a nuestro querido amigo y colaborador Filem&#243;n#Ef 3,1; 4,1; Flp 1,7.13; Col 4,17-18; Rm 16,5; Col 4,5. 2y a toda la iglesia que se re&#250;ne en su casa, en especial a la hermana Apia y a Arquipo, compa&#241;ero nuestro de lucha. 3Que Dios, nuestro Padre, y Jesucristo, el Se&#241;or, os concedan gracia y paz.#Rm 1,7; Ga 1,3; Flp 2,1; Col 1,2; 1 Ts 1,1; 2 Ts 1,2.</div><div class="s1">El amor y la fe de Filem&#243;n</div><div class="p"> 4En mis oraciones me acuerdo siempre de ti y doy gracias a Dios#Rm 1,8-9; Col 1,3-4. 5al o&#237;r hablar del amor y la fe que profesas a Jes&#250;s, el Se&#241;or, y a todos los creyentes. 6&#161;Ojal&#225; que esa fe tuya, compartida con nosotros, se vuelva eficaz y llegues as&#237; a descubrir todo el bien que podemos hacer por Cristo! 7Tu amor, hermano, me ha proporcionado mucha alegr&#237;a y consuelo, pues ha venido a ser b&#225;lsamo para el coraz&#243;n de los creyentes.#2 Co 7,4.</div><div class="s1">Pablo aboga por On&#233;simo</div><div class="p"> 8Por eso, aunque Cristo me concede pleno derecho para darte &#243;rdenes sobre lo que debes hacer, 9prefiero dirigirte un ruego inspirado en el amor. Yo, el anciano Pablo, encarcelado ahora por causa de Cristo Jes&#250;s,#ver Flm 1. 10te hago un ruego en favor de On&#233;simo, el hijo a quien he engendrado entre cadenas.#1 Co 4,15; Ga 4,19; Tt 1,4. 11En otro tiempo te fue in&#250;til; ahora, en cambio, se ha vuelto &#250;til tanto para ti como para m&#237;. 12Te lo mando de nuevo como si te enviase mi propio coraz&#243;n.</div><div class="p"> 13Me hubiera hecho ilusi&#243;n retenerlo aqu&#237;, a fin de que pudiera ayudarme, haciendo tus veces, ahora que estoy encadenado por anunciar el evangelio.#Flp 2,30. 14Pero no he querido hacer nada sin contar contigo para que el bien que puedas hacer lo hagas de buen grado y no a la fuerza.#2 Co 9,7; 1 Pe 5,2.</div><div class="p"> 15&#161;Qui&#233;n sabe si On&#233;simo te abandon&#243; por breve tiempo precisamente para que puedas ahora recobrarlo de manera permanente! 16Y no ya como esclavo, sino como algo m&#225;s, como hermano muy querido. As&#237; lo es, al menos, para m&#237;; cu&#225;nto m&#225;s debe serlo para ti, no solo como persona, sino como creyente. 17Si, pues, de verdad eres mi amigo, rec&#237;belo como si fuera yo mismo. 18Y si te caus&#243; alg&#250;n da&#241;o o te debe algo, c&#225;rgalo a mi cuenta. 19Soy yo, Pablo, el que lo firmo de mi pu&#241;o y letra; yo te lo pagar&#233;. Eso por no recordarte que tambi&#233;n t&#250; est&#225;s en deuda conmigo.#1 Co 16,21; Ga 6,11; Col 4,18; 2 Ts 3,17. 20Por tanto, hermano, a ver si como creyente me haces este favor, confortando con ello mi coraz&#243;n en Cristo.</div><div class="p"> 21Te escribo con la confianza de que atender&#225;s mi ruego. Estoy, incluso, seguro de que har&#225;s m&#225;s de lo que te pido. 22Y, de paso, prep&#225;rame hospedaje, pues espero que gracias a vuestras oraciones se me conceda poder visitaros.</div><div class="s1">Saludos finales</div><div class="p"> 23Te saluda Epafras, mi compa&#241;ero de prisi&#243;n por causa de Cristo Jes&#250;s. 24Te saludan tambi&#233;n Marcos, Aristarco, Dimas y Lucas, mis colaboradores.#Hch 19,29; Col 4,10.14; 2 Tm 4,11. 25Que la gracia de Jesucristo, el Se&#241;or, permanezca con vosotros.</div>
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