Planes y devocionales gratis relacionados con Salmos 139:3

Muchos son los deseos de nuestro corazón, Dios lo sabe y nos ha regalado la oración. Somos privilegiados porque nos permite llegar ante Él con nuestras peticiones y podemos tener expectativas de que las mismas serán contestadas. En este plan iremos a la Palabra para que nos aliente y nos ayude a seguir creyendo y esperando que nuestro deseo será cumplido de acuerdo a la buena voluntad de nuestro Padre.

La vida misional no es una vida autoempoderada o autoguiada. No tiene que ver con discernir un desafío, prepararte y correr hacia él, todo por tus propias fuerzas. Por ese camino ciertamente se presenta la desilusión y hasta la amargura. La vida misional es empoderada el 100% por los regalos del Espíritu Santo—su poder, su presencia, su provisión y su perspectiva. En este plan de 5 días, vamos a considerar cómo los primeros discípulos y apóstoles aprendieron a vivir misionalmente, una vida formada por los regalos que Jesús les dio a través de su Espíritu.

Este plan de lectura de 6 días presenta devocionales para mujeres extraídos de la Biblia Verdadera Identidad NVI - La Biblia Para La Mujer De Hoy . Los devocionales te ayudarán a reflexionar en la Palabra de Dios y su relación con nuestras vidas como mujeres y los muchos y variados roles que desempeñamos.

El Espíritu Santo es Dios viviendo dentro de ti, hablando a tus pensamientos y acercándote más a Él. Siempre te alienta a que hagas no solo lo correcto, sino también lo que viene de Dios. Él está allí para ayudarte a tomar decisiones y hacer cosas que cambiarán tu vida. Sumérgete en este práctico recorrido de 6 días para entender quién es Él y por qué no puedes vivir una vida santa sin Él.

Cuando el apóstol Juan habló de Jesús como el "Unigénito del Padre", en los textos originales en griego refiere a algo "Único en su clase". La eterna e invisible palabra de Dios tomó forma visible, la más exacta y tangible muestra del amor de Dios por la humanidad encontró su mayor expresión en la vida humana. Y como regalo de Dios para nosotros, Jesús, captura toda nuestra atención.

Como alguien soltero o que está saliendo con alguien y que quiere tener sexo, es posible que te preguntes: “¿Qué hago con mis deseos sexuales?” ¡Dios nos creó como seres sexuales! Por lo tanto, es normal tener deseos sexuales. Si bien nuestros cuerpos producen hormonas que pueden hacernos “anhelar” el sexo, existen otras razones por las que el sexo se siente como una necesidad genuina.

Dios nos ha dado y nos da innumerables bendiciones. Una de ellas es la bendición de poder hablar con Él. A pesar de saber cuán importante es ir delante de Dios en oración, es una de las áreas con las que más tenemos que lidiar. Unas veces, tenemos momentos íntimos preciosos con el Señor, y otras pareciera que hablamos con nosotros mismos. Volvamos juntos a apasionarnos por la oración.

A pesar de tanta conectividad y medios sociales, estudios revelan que el aislamiento y la soledad se han convertido en una epidemia. Incluso, podemos llegar a pensar que para Dios también somos invisibles. Este devocional se centra en cuatro “invisibles” que fueron visibles para Dios y los consejos que podemos aprender de ellos cuando nos sentimos invisibles y olvidados.

Dios sabe que todos estamos heridos; aun así, Él nos ama, tal como somos. Él promete que, en esta vida, podemos experimentar Su sanidad. Sin embargo, nuestras debilidades también pueden servir para acercarnos a Él y a los demás. A continuación, algunas promesas de Dios con relación a nuestras heridas.

El desánimo es una realidad que en ocasiones nos alcanza a todos. Es como una nube que nos ciega, nos adormece y nos lleva a sumirnos en la queja. Sin embargo, ¡tengo buenas noticias para ti! Dios mismo te dice: “¡Ten ánimo!” No es Su plan para tu vida que estés abatido, sino que Él te ha dado poder en el Nombre de Jesús para que vivas una vida victoriosa. Te propongo este plan de lectura de 7 días, en el cual compartiré contigo claves que te ayudarán a identificar las fuentes del desánimo en tu vida, y te animarán a vivir una vida plena en el Señor. ¿Estás preparado(a)? Tu vida va a cambiar.