¡Llévame contigo, ven, corramos! El rey me ha traído a su alcoba. Cuánto nos alegramos por ti, oh rey; elogiamos tu amor aún más que el vino. Con razón te quieren las jóvenes. Soy morena pero hermosa, oh mujeres de Jerusalén, morena como las carpas de Cedar, morena como las cortinas de las carpas de Salomón. No me miren así por ser morena; el sol ha bronceado mi piel. Mis hermanos se enojaron conmigo; me obligaron a cuidar de sus viñedos, por eso no pude cuidarme a mí misma, mi propio viñedo. Dime, mi amor, ¿hacia dónde llevarás hoy tu rebaño? ¿Dónde harás descansar tus ovejas al mediodía? ¿Por qué tendría yo que vagar como una prostituta entre tus amigos y sus rebaños? Oh, más hermosa mujer, si no lo sabes, sigue las huellas de mi rebaño y apacienta tus cabritos junto a las carpas de los pastores.
Leer Cantar de los Cantares 1
Escuchar Cantar de los Cantares 1
Compartir
Comparar todas las versiones: Cantar de los Cantares 1:4-8
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos