Levantándose de allí, se fue a la región de Tiro y de Sidón; y entrando en una casa, no quiso que nadie lo supiese; pero no pudo esconderse. Porque una mujer, cuya hija tenía un espíritu inmundo, luego que oyó de él, vino y se postró a sus pies. La mujer era griega, y sirofenicia de nación; y le rogaba que echase fuera de su hija al demonio. Pero Jesús le dijo: Deja primero que se sacien los hijos, porque no está bien tomar el pan de los hijos y echarlo a los perrillos.
Leer S. Marcos 7
Escuchar S. Marcos 7
Compartir
Comparar todas las versiones: S. Marcos 7:24-27
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos