Jeremías dijo: «Dios mío, tú lo sabes todo; tú bien sabes que, por ti, me insultan a todas horas. ¡Acuérdate de mí, y ven a ayudarme! ¡No te quedes cruzado de brazos y castiga a los que me persiguen, antes de que me maten! »Todopoderoso Dios de Israel, cuando tú me hablaste, tomé en serio tu mensaje. Mi corazón se llenó de alegría al escuchar tus palabras, porque yo soy tuyo. »Yo no ando de fiesta en fiesta, ni me interesa divertirme. Prefiero estar solo, porque estoy contigo y comparto tu odio por el pecado. ¿Por qué tengo, entonces, que sufrir este dolor constante? ¿Por qué no sanan mis heridas? Realmente, me decepcionas; eres, para mí, como un arroyo seco; ¡como una fuente sin agua!» Dios me contestó
Leer Jeremías 15
Compartir
Comparar todas las versiones: Jeremías 15:15-19
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos