¿Cómo amar a los cristianos insoportables?Muestra

¿Cómo amar a los cristianos insoportables?

Preguntémonos primero qué es amar: perdonar y ser misericordiosos, así como Dios lo es. Jesús dijo que aunque aprendimos a amar a nuestro prójimo y odiar a nuestro adversario, él nos pide que para actuar como verdaderos hijos del Padre, amemos y oremos también por los que nos persiguen. Cristo se refirió a la “ley de los fariseos”, que añadieron «odia a tu enemigo», para corregirlos diciendo ¡ama a tus enemigos!, y allí podríamos incluir también a los “cristianos difíciles de amar”. Pues si solo somos amables con nuestros amigos, ¿qué nos diferencia de los demás, si hasta los paganos lo hacen?

Amar no solo a los que nos aman, sino a los que nos odian, a los difíciles de amar, es perdonarlos y ser misericordiosos con ellos aunque no lo merezcan, así como Dios es misericordioso con todos. Amarlos es entregárselos al Señor para que él tome el control de su vida mientras renunciamos al deseo de que paguen las consecuencias de sus acciones porque a veces los soltamos, pero le decimos al Padre algo como «tú dices mía es la venganza y ¡quiero verla!». ¡No! Él quiere que se los entreguemos y pensemos lo bueno y no lo malo de ellos, que los bendigamos. 

Cuando todavía éramos pecadores, ¡Cristo murió por nosotros!, pero en la iglesia nos cuesta amar más a los cristianos que a los paganos; no los perdonamos ni toleramos ni alabamos, pero hasta defendemos a los famosos que son adúlteros, inmorales, depravados sexuales, violentos con sus parejas; los excusamos aunque se divorciaron varias veces y son borrachos, viciosos y groseros. En cambio, cuando un cristiano cae, le “damos duro”. ¡¿Por qué no hay la misma misericordia, el mismo perdón y las mismas oportunidades?!

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