Creemos en Jesús: "El Redentor"Muestra

Resurrección y Ascensión de Jesús

La resurrección corporal fue crítica para su obra de redención. Al levantarse de los muertos, Jesús conquistó a la muerte misma, y aseguró la vida física eterna de todos los que tienen fe en él. Veamos como Pablo describe la resurrección de Jesús en 1 Corintios 15:20 y 21: 

Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho. Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos.

El pecado de Adán trajo la muerte. Pero cuando Jesús se levantó de los muertos, garantizó que todos los que creían en él también serían resucitados. Y cuando él regrese, viviremos para siempre en cuerpos glorificados que serán como el que ya es de nuestro Redentor.

Después de su resurrección, Jesús se apareció a sus discípulos durante un período de 40 días y les enseñó acerca del reino de Dios. Y al final de ese tiempo, fue llevado corporalmente al cielo. Este evento se registra en Lucas 24:50 y 51 y Hechos 1:3 al 11.

La ascensión fue importante para la obra de redención de Jesús por al menos dos razones. Por un lado, ascendió al cielo para ser entronado como rey. Él ahora gobierna como el rey sirviente del Padre sobre toda la creación, y especialmente sobre su pueblo, la iglesia. Estos detalles son mencionados en lugares como 1 Corintios 15:23 al 25; Hebreos 12:2; y 1 Pedro 3:22. 

Por otro lado, la ascensión fue también importante porque le permitió a Jesús completar su sacrificio en el templo celestial, y permanecer en la presencia del Padre mediando e intercediendo por su gente. En este rol como mediador, Jesús le recuerda al Padre del sacrificio que proveyó en la cruz, para que el Padre continúe perdonando y bendiciendo a su pueblo fiel. Leemos esto en lugares como Hebreos 7:25 y 26, y capítulo 9:11 al 28.