Seguir a JesúsMuestra

Lucharás contra el descontento hasta que dejes que Cristo sea todo lo que necesitas. ¿No

me crees? Pruébame. Persigue todo lo que hayas deseado. Te desafío. Vé y gana tanto dinero como quieras. Compra todo lo que quieras. Logra, conquista, acumula, repite. Quizá te interesen más las fiestas. Entonces, intenta esto. Sal de fiesta. Vé tras cada emoción, date la buena vida, goza con todo lo que puedas encontrar. Encuentra una novia o un novio nuevos. Si no funciona con esa persona, intenta con alguien más. Cambia todos tus viejos amigos por amigos nuevos. Hazte popular.

Consigue el plan de datos más grande y recopila claves de wi-fi en cada parada. Visita todo lugar divertido. Comparte cada pensamiento de inspiración que tengas, cada chiste. Publica fotos y videos también, por supuesto. Nunca dejes de compartir el espectáculo.

Publica todo en línea para que todo el mundo lo vea. Acumula “Me gusta”, amigos y seguidores hasta que todo sea vago y confuso. Apresúrate hasta que tu vida real exceda tus sueños. Y aun cuando hayas alcanzado la cumbre, puedo garantizarte una cosa: tu anhelo por más nunca terminará.

¿Por qué no?

Porque fuiste creado para la eternidad, no para este mundo tal como lo conocemos. Nada en la Tierra podrá jamás satisfacer el anhelo espiritual que sientes en tu interior, aun cuando puedas tenerlo todo.

Nada.

Recuerdo cuando era adolescente, años antes de conocer a Cristo, que escuchaba a las personas decir: “Dios pone un vacío con la forma de Cristo en el interior de cada persona”. Ese dicho me perturbaba. No entendía de qué estaban hablando. Pero entonces, un día entendí por mí mismo por qué lo decían: porque es absolutamente verdad. Nada fuera de una relación viva con Jesús puede llenar el vacío interior.

Cuando Cristo es todo lo que tienes, finalmente te das cuenta de que Él es todo lo que necesitas.

Jesús es lo único que importa.