El Reto 30/30Muestra

Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre misericordioso y Dios de toda consolación… 2 Corintios 1:3

Todos tenemos momentos de crisis o dificultades en nuestras vidas. Muchas veces son causadas por grandes pérdidas y el duelo se produce como resultado.

Ya sea la pérdida de un ser querido, un divorcio, una crisis financiera que le dé un vuelco a tu vida, el traslado a un nuevo lugar, dejando atrás a la familia y los amigos, necesitarás el consuelo y la fortaleza de Dios para atravesar por el proceso de duelo mientras tratas con ello. Una forma en la que Dios nos da Su amor, ánimo y consuelo es a través de Su Palabra. 2 Corintios 1: 3 nos dice que Él es Dios de toda consolación ". Él puede ayudarte a superar cualquier pérdida o crisis que traiga dolor o desanimo a tu vida.

La clave para un proceso de duelo saludable es atravesarlo con la gracia de Dios. A medida que te enfrentas a la realidad de la pérdida en tu vida, es importante que te permitas llorar. Luego, cuando sea el momento adecuado y Dios sepa que estás listo, te hablará a tu corazón: “Es hora de levantarte y continuar”. Podrás hacerlo por fe cuando encuentres consuelo en Él a través del estudio de la Palabra.

La Biblia está llena de mensajes alentadores para ayudarte a continuar, paso a paso. Romanos 5: 7-8 y 8: 31-35 te recuerdan el amor incondicional de Dios, que Él siempre está de tu lado y que nada puede separarte de Su amor. Filipenses 4:13 dice que todo lo puedes en Cristo. Y Proverbios 3: 5-7 te recuerda que pongas toda tu confianza en Dios y en Su sabiduría para descubrir lo que debes hacer. ¡La verdad sobre el amor y cuidado de Dios por ti es el mayor consuelo que siempre necesitarás!

Practicando lo Aprendido:

Dios te ama más de lo que puedes saber o comprender. Él se preocupa por cada detalle de tu vida, y anhela ser tu consuelo, consuelo y ánimo cuando te duele. Si está sufriendo una pérdida hoy o está luchando con una herida en su alma, vaya a Dios y Su Palabra para consolarlo. El esta contigo Él sabe exactamente cómo te sientes. Y Él es capaz de sanarte en cualquier área que estés lastimado.