Jesús es Vida - Un estudio sobre el Libro de JuanMuestra

Porque tanto amó Dios al mundo

Juan 3:16 es uno de los versículos más comúnmente conocidos en el cristianismo, ¡y por una buena razón! Pero conocer el contexto de ese versículo lo hace aún más especial. Jesús estaba hablando con Nicodemo, el fariseo y gobernante judío. Los fariseos eran como policías o jueces porque estaban evaluando el comportamiento según la ley para ver si era "justo, ya veo". Entiendes... ¿Fariseo?

En fin, fueron los fariseos quienes llevaron a Jesús a una mujer sorprendida en el acto de adulterio, esperando que Él la avergonzara y la castigara, pero para su sorpresa y desaprobación, Él le dio gracia y perdón.

Jesús respondió explicando que la razón por la que el Concilio lo odiaba y trataba de atraparlo era que ya sabía que su camino no era el camino. Las malas acciones y los corazones quieren permanecer ocultos. La oscuridad odia la luz.

De vuelta a Nicodemo. Probablemente él pensó que defender la ley castigando a las personas pecadoras lo hacía correcto con Dios. Es interesante que en Juan 3:16-17, Jesús se dirigió a su corazón crítico diciendo esencialmente que Dios no lo envió a condenar al mundo sino a salvarlo.

Así que, evalúa tu corazón. ¿Estás escabulléndote tratando de ocultar tu pecado, ofensa o mala actitud de juicio? No está funcionando. Dios lo sabe. ¡Solo te impide vivir en la abundancia que Jesús murió para darte! Déjalo ir. Ven a Jesús, y Dios te fortalecerá.

La bondad de Dios lleva a las personas a la familia de Dios, no a la condena y al juicio, porque las personas ya están condenadas. Saben dónde se equivocan, ¿no es así?

Juan 16:8 dice que el Espíritu Santo viene a convencer al mundo del pecado. La palabra pecado aquí es singular y significa el pecado de no creer y recibir a Jesús. No son los pecados de sus malas decisiones y comportamientos porque Jesús dio Su vida por los pecados de todo el mundo. Él terminó el problema del pecado.

Toda la ira de Dios fue puesta sobre Jesús. ¡Él tomó tu lugar y el lugar de la persona más pecadora que conoces! Sin embargo, las personas seguirán eternamente separadas de Dios si no creen que Jesús tomó su lugar. Es por eso que continuamos mostrando el amor de Dios a aquellos que aún no conocen a Dios para que puedan ver el amor de Dios en nosotros y encontrar una relación con Él.

Considera:

¿Qué crees que motivó a los fariseos? ¿Qué nos motivaría a denunciar los pecados de alguien?

¿A quién has condenado que deberías haber mostrado bondad y amor?

¿Cómo puedes extender la gracia y la bondad a las personas en tu vida, incluso cuando no es fácil?

Oración:

Padre, enséñame a amar y a mostrar bondad a las personas que no entiendo. Quiero conocerte más y revelar Tu corazón a todos los que conozco, pero no puedo hacer esto sin experimentar plenamente Tu amor por mí. Gracias por tomar mi lugar. Lo recibo. Recibo Tu amor.

*Has estado al día con tu diario Jesús Es ... ? ¡Sigue! Será un gran recurso en el que reflexionar.