Todo lo que quiero para NavidadEjemplo

Muy a menudo, nuestra mentalidad es dar algo para obtener algo. Hacemos cumplidos para que nos devuelvan uno. Damos un seguir para obtener un seguir. 

No importa lo que sea, a menudo hay una expectativa con respecto a lo que damos. Pero la verdadera generosidad no tiene esa misma expectativa. Dios nos dio a Jesús, no porque le hayamos dado algo para merecer o ganar este regalo, sino simplemente porque "llegó el momento". Fue un regalo intencional y amoroso, uno que demuestra una generosidad verdadera e inquebrantable. 

Hoy, tómate un momento para orar. Dale gracias a Dios por el regalo de Jesús al mundo. Luego, pídele que te dé un espíritu más generoso esta temporada navideña.