[Hacer la diferencia] ValorMuestra

Hacer la diferencia comienza en el corazón

Después que Jesús viajó a Capernaúm en la barca, algunos hombres le llevaron a uno de sus amigos. Su amigo, que estaba paralizado, yacía en su lecho. ¿Qué fue lo primero que Jesús le dijo? «Sé valiente». Él dijo: «Sé valiente, hijo, tus pecados son perdonados». Ahora, algunas versiones de la Biblia dicen: «Anímate» o «Ten buen ánimo». Lo que el griego dice es que Jesús quería que el hombre fuera valiente, alegre, audaz, que se levantara y buscara lo suyo. Los que hacen la diferencia viven con valentía.

Los cristianos a menudo leen esta historia y caracterizan el evento como un momento de sanidad. Pero hay más en esta historia que eso. Note que Jesús comienza con el corazón. Antes que él dijera al hombre paralítico que se levante y tomara su lecho, Jesús dice: «Sé valiente, hijo, tus pecados son perdonados». Esto no tiene nada que ver con caminar, no tiene nada que ver con estar paralizado.

Lo primero que hace Jesús es declarar al hombre que sus pecados son perdonados. Él usa el tiempo presente. No sugiere que los pecados del hombre fueron perdonados en el pasado, ni que sus pecados serán perdonados en un futuro lejano, cuando llegue al cielo. No, los pecados del hombre son perdonados allí mismo, cuando Jesús habla. Al perdonar el pecado del hombre, Jesús declaró que él era Dios en la carne. Esta es una declaración de la deidad. Y así, el hombre recibió el perdón de Cristo. El pecado es siempre el problema, y ​​relacionarse correctamente con Dios es siempre la respuesta.

Tenemos la tendencia a pensar de forma equivocada al respecto. Nos decimos: «Tengo que ir más a la iglesia. Tengo que hacer más para ser santo, y necesito pecar menos. Luego, si tengo todas mis prácticas religiosas completas, seré un buen cristiano». Pero ser cristiano no es sobre lo que haces, sino sobre tu relación con Dios.

Jesús comenzó con el corazón. Para hacer la diferencia, comienza con el corazón. Ten la valentía de permitir que Dios trabaje en ti para comenzar tu transformación espiritual.

Ora 

Dios, haz una diferencia en mí. Dame la valentía para permitirte trabajar profundamente en mi corazón. Perdona mis pecados a través de Jesús. Renuévame a través de tu Espíritu Santo.