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365 días con Dios

DÍA 8 DE 31

 8 enero - No temas, CREE SOLAMENTE

Marcos 5:21-24 TLA "Jesús llegó en la barca al otro lado del lago, y se quedó en la orilla porque mucha gente se juntó a su alrededor. En ese momento llegó un hombre llamado Jairo, que era uno de los jefes de la sinagoga. Cuando Jairo vio a Jesús, se inclinó hasta el suelo y le rogó: Mi hijita está a punto de morir. ¡Por favor, venga usted a mi casa y ponga sus manos sobre ella, para que se sane y pueda vivir! Jesús se fue con Jairo. Mucha gente se juntó alrededor de Jesús y lo acompañó.”

Jairo estaba necesitado de un milagro para su hija que agonizaba; quizás hoy tu esperanza esté agonizando y necesites un milagro a gritos, entonces LEVÁNTATE Y CREÉLE A DIOS, aunque ahora agonicen tus fuerzas, pues Él es el mismo ayer, hoy y siempre.  Un milagro es un hecho sobrenatural debido a una intervención divina, por lo tanto, ningún problema es demasiado grande para que Dios no intervenga, ni ninguna persona es demasiado pequeña para que no tenga la atención de Dios.

Jeremías 32:17 TLA “¡Ah, Señor mi Dios! Tú, con tu gran fuerza y tu brazo poderoso, has hecho los cielos y la tierra. Para ti no hay nada imposible.”

¿Qué hizo Jairo para recibir su milagro? 

Puso sus ojos en JESÚS pues cuando Jairo supo que Él estaba cerca, fue a buscarlo y lo vio. Muchos de los que necesitan un milagro primero tratan de buscar por su cuenta, buscan doctores, buscan psicólogos, terapeutas, chamanes, amores que los saquen de su soledad... Pero lo primero que tienes que hacer es BUSCAR A DIOS y someterte a Él. Búscalo por lo que Él es, con todo tu corazón, con todas tus fuerzas, Él está cerca de ti aunque no lo puedas sentir… Pon tus ojos en Dios que sí sabe la situación por la que estás pasando.

Luego, la Biblia nos dice que se POSTRÓ A SUS PIES.

Jairo no era cualquier persona, él era un principal en la sinagoga, era alguien importante, era una persona de autoridad muy respetada. Pero cuando se trató de ver un milagro en la vida de su familia, lo que él hizo fue postrarse a los pies del Maestro. 

¿Tú te has postrado por un milagro? ¿Le haz pedido a Dios como tu único recurso? Deja el orgullo de lado y arrodíllate... Ora a Aquél que sí puede hacer un milagro en tu vida: Dios.

Arrodillarse con frecuencia te mantendrá bien parado para con Dios. Cuando te sientas caer, cae de rodillas y ora a Dios de todo corazón.

Jairo oró ESPECÍFICAMENTE 

Oraciones especificas traen respuestas específicas. 

Tu oración sincera pidiendo un milagro hará que busques a Dios por lo que Él es, confieses con tu boca y creas en tu corazón que Él es tu Dueño, serás salvado. Pon en acción tu oración: “Quiero ser sano de la columna, tócame Dios y sáname. Hoy puedo ser libre de este cáncer, de esta migraña, en el nombre de Jesús, porque yo decido ponerte a ti en primer lugar en mi vida, creyendo que tienes el poder para ayudarme, reconociéndote como mi Dios y creyendo en tu amor y tu bondad, cual fuera tu respuesta a mi oración”. 

Marcos 5:35-41 TLA “Jesús no había terminado de hablar cuando llegaron unas personas desde la casa de Jairo, y le dijeron: —¡Su hija ha muerto! ¿Para qué molestar más al Maestro?

36 Jesús no hizo caso de lo que ellos dijeron, sino que le dijo a Jairo: —No tengas miedo, solamente confía.

37 Y sólo permitió que lo acompañaran Pedro y los dos hermanos Santiago y Juan. 38 Cuando llegaron a la casa de Jairo, vieron que la gente lloraba y gritaba y hacía mucho alboroto. 39 Entonces Jesús entró en la casa y les dijo: —¿Por qué lloran y hacen tanto escándalo? La niña no está muerta, sólo está dormida.

40 La gente se burló de Jesús. Entonces él hizo que todos salieran de allí. Luego entró en el cuarto donde estaba la niña, junto con el padre y la madre de ella y tres de sus discípulos. 41 Tomó de la mano a la niña y le dijo en idioma arameo: —¡Talitá, cum! Eso quiere decir: «Niña, levántate.»”

Hoy Dios nos dice lo mismo: ¡Levántate!

No temas, cree solamente, pues puede no haber muerte en la enfermedad sino una oportunidad para demostrar la gloria de Dios, si tu interés genuino es que Él haga su voluntad en tu vida.

Cuando el temor toque a tu puerta, manda a tu fe a responderle.

Mi oración por ti es que estés tan firme en tu fe, tan confiado en tu Dios que suceda lo que suceda en tu vida, sabrás que Él tiene un propósito mayor con todo lo que está sucediendo, porque Él siempre tiene cuidado de tu vida.

Cuando paso por momento difíciles me repito a mí misma: "No temo, CREO SOLAMENTE..."

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