[#Vida] Mediana EdadMuestra

Relaciones

Cuando llegamos a la mediana edad, comenzamos a entender qué es lo que realmente importa en la vida. Hemos pasado tanto tiempo convirtiéndonos, que ahora estamos aprendiendo a ser. Una de las últimas piezas de Escritura que recibimos del apóstol Pablo antes de que muera, es en la que habla de las relaciones. Y al final del día, eso es lo que realmente importa. Nuestra relación con Dios, nuestra relación con nuestros cónyuges, nuestros hijos, nuestros padres, y nuestra familia y amigos. Se trata de todas estas conexiones que tenemos. Eso es lo realmente importante.

Podemos estar en un momento en nuestras vidas en el que no tenemos el cuerpo que hubiésemos querido tener, tal vez no tenemos el éxito que pensábamos tener, quizá no nos vayamos a esas vacaciones deseadas todos los años. Pero no se trata de eso. No invirtamos en las cosas pasajeras de la vida. Invirtamos en relaciones. Invirtamos en las personas. Amémosles, preocupémonos por ellos. Seamos parte de las vidas de otras personas. Que Dios haga algo grandioso a través de tu vida, en la vida de todos los que te rodean. 

En uno de sus libros, Paul David Tripp dice: «A esta altura de la mediana edad, han habido puntajes en las tarjetas de calificaciones e informes de progreso. Ha habido innumerables conferencias con maestros y eventos de atletismo, campamentos y promociones. Ha habido más viajes de día y escapadas de fin de semana, y vacaciones de las que podría recordar. Ha habido momentos interminables de disciplina, corrección e instrucción. Hemos comprado montañas de ropa, camiones de comida, y mi esposa y yo hemos hablado, orado, discutido y llorado a lo largo del camino. Nos hemos escapado a innumerables restaurantes solo para estar juntos. Hemos llenado estacionamientos enteros de vehículos usados, un depósito de ropa usada y pilas de vidrio roto, platos y decoraciones. Pero solo son artefactos de una civilización familiar que ya pasó, pero todo pasó tan rápido y sin darnos cuenta».

La vida pasa muy rápido, pero las relaciones duran. Intenta invertir en eso. Nuestra relación con Dios debe ser nuestra prioridad número uno, luego nuestra familia, y luego nuestros amigos y todos los que nos rodean, quienes pueden hacernos mejores y a quienes podemos hacer mejores. 

Tal vez eres un padre que está envejeciendo y tus hijos son ya adultos y están en la mediana edad, puedes ayudarlos a pasar por esta etapa de la vida a través de tu propia experiencia. Tal vez eres joven todavía y tus padres están pasando por la mediana edad, puedes ayudarlos comprendiéndolos, amándolos, honrándolos y levantándolos.

Para más información acerca de este devocional, por favor sigue este enlace:  https://houstonsfirst.org/message/midlife