[Serie Vertical] Mira hacia arribaMuestra

Fuimos hechos a Su imagen y escogidos por Su amor

¿Quién te puede decir quién eres? ¿Quién tiene la autoridad, el poder y la influencia suficiente para definirte? ¿Es tu familia, tus amigos o tu pareja? ¿Tu nombre, ascendencia, raza, origen social o la cultura misma te definen? La respuesta a estas preguntas explicará por qué estás donde estás hoy, y posiblemente influya en tu destino.

No nos engañemos diciendo que estos factores, o personas, no tienen nada que ver con la forma en que nos percibimos a nosotros mismos. Desafortunadamente, todos hemos sido culpables de caer en esta trampa. Y, sin embargo, cuando se trata de definir quiénes somos, ¿quién es mejor que el propio Creador? ¿Quién puede conocerte mejor que Aquel que te soñó y te formó en el vientre de tu madre? ¿Quién es mejor que Aquel que te amó antes de la creación del mundo?

Como cristianos, todos sabemos que esta es la verdad, pero la mayoría de nosotros no vivimos de acuerdo a ella. ¡Tendemos a mirar horizontalmente cuando deberíamos estar mirando hacia arriba! Entregamos la libertad que Dios nos ha dado a la gente y a diferentes variables sobre las que no tenemos control. Rápidamente olvidamos que fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios, soy una creación admirable.

Hay un aspecto eterno en nosotros, algo precioso que nos hace especiales. Fuimos creados en amor, para Dios, y por Dios. Cada uno de nosotros es único; no hay otro ser humano en el mundo que tenga sus huellas dactilares. Echa un vistazo a tus dedos y recuerda el implacable amor de Dios por ti.

Tal amor merece no sólo nuestra admiración sino también nuestra lealtad. En la lectura de hoy, verás que Dios dice que somos "escogidos por su amor" (Deuteronomio 10:15) NTV. Él, que es el Dios de los dioses y el Señor de los señores, poderoso y asombroso, nos ama no sólo con Sus palabras sino también con sus acciones.

Nuestra respuesta a un amor tan indescriptible es vivir con una perspectiva vertical, mirar hacia arriba para encontrar la respuesta a nuestras necesidades más profundas. Encontramos el significado, el valor y las respuestas a nuestras preguntas más profundas en Dios y sólo en Dios. Oro para que la comprensión y la experiencia del amor de Dios en tu vida te lleven a buscar su reino primero y a amarlo con todo tu corazón, alma y mente. Como consecuencia, experimentarás una verdadera libertad, un sentido exacto y verdadero de autoestima, y la perspectiva justa que viene de mirar hacia arriba.