DesglosarEjemplo

¿Qué cosa valiosa posees? Tal vez un par de zapatillas deportivas geniales, el iPhone más reciente o joyas caras heredadas de tu abuela. Sea lo que sea, lo más probable es que la guardes en un lugar seguro. La pones en un lugar en donde sabes que siempre podrás encontrarla cuando la necesites. En el Salmo 119, David escribió que nuestros corazones son el mejor lugar para esconder la Palabra de Dios. Es el lugar donde podemos mantenerla cerca de nosotros. El lugar al que podemos acudir cuando sabemos que la necesitamos. Cuando memorizamos los pasajes bíblicos, siempre los tenemos con nosotros para orientarnos, confortarnos y guiarnos. Comienza memorizando este versículo. ¡Esta semana escóndelo en tu corazón!