ExplicadaEjemplo

En realidad no podemos ver a Dios. ¡No de una forma física al menos! Y si somos honestos, a veces eso hace que sea difícil el sentir que estamos conectando con Él. Nos hacemos preguntas tales como: ¿Cómo sabemos que Él está escuchando? ¿Sera que el responderá alguna vez? ¿Cómo sabemos que Él está ahí realmente? Bueno, aquí tenemos una promesa de que si lo buscamos con todo nuestros corazones, lo encontraremos a Él. 

Si quieres escuchar a Dios, escóndete y ve a buscar. Ve a un lugar tranquilo y pasa tiempo con Él. Sumérgete en la Biblia y pídele a Él que te enseñe a través de ella. Tu puede que no lo veas a Él físicamente, pero puedes confiar en la promesa de que Él esta ahí. Cuando lo buscas a Él, Él te habla a tu corazón, y tu relación con el crecerá.