Cómo Liberarse De La CulpaMuestra

Cómo vencer la culpa con la Palabra de Dios

Para que podamos vencer los sentimientos de culpa por nuestros pecados, necesitamos conocer la plenitud de la vida que Dios nos ha dado a través de la muerte de Cristo. Cuando aceptamos el sacrificio de Jesús, recibimos un enorme regalo. No es solo un regalo de perdón. Es un regalo de abundante vida divina, libre de culpa y condena. Como creyentes, nos transformamos en una nueva creación. La Escritura nos equipa con las verdades de Dios que necesitamos para una vida diaria libre de culpa. 

Primero, necesitamos creer firmemente lo que la Biblia declara sobre nuestros pecados. La Escritura nos dice que cuando recibimos a Cristo ya no estamos condenados a muerte. Dios, el juez justo, aceptó la muerte de Jesús como un reemplazo de nuestro castigo. Hemos sido justificados por la fe y tenemos paz con Dios. Estamos posicionados en la gracia de Dios. Legalmente, en nuestros mejores días no somos más aceptables para Dios que en nuestros peores días. Esto se debe a que somos adoptados como sus hijos. Cuando nuestro Padre Celestial nos mira, no ve nuestro pecado, si no a Jesús. Esta es la profundidad del amor de Dios. La única forma en que podemos arraigarnos en el amor de Dios es llenándonos de verdades bíblicas. 

Por lo tanto, necesitamos estudiar las Escrituras diariamente para estar equipados para vivir una vida cristiana. La Biblia compara este proceso con ponerse la armadura de Dios. Se nos dice que nos ciñamos con el cinturón de la verdad, que tiene su origen en las Escrituras. Entonces, se nos dan instrucciones de usar la espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios. En otras palabras, la Biblia es tanto un arma defensiva como ofensiva. Cuando leemos las Escrituras, aprendemos las verdades sobre nuestra redención, salvación y perdón. A medida que aplicamos la fe a estos principios, llenan nuestro corazón y mentes con el amor de Dios. Sin embargo, también podemos usar la Palabra de Dios para ir a la ofensiva contra Satanás. 

Cuando el diablo viene a nosotros con sus acusaciones, podemos rechazarlas con las verdades bíblicas que dicen quiénes somos en Cristo. Cuando trata de decirnos que somos imperdonables o no amables, podemos decirle que somos completamente aceptados en el Amado. Podemos luchar contra el sentimiento de culpa con la verdad de la Palabra de Dios.