No Más Vergüenza Muestra
Semana 1 - Día 3
Abram y Sara y la Vergüenza de la Infertilidad
Lectura: Génesis 15:1-6; Génesis 16:1-5; Mateo 19:26
DEVOCIONAL: Génesis 16:1-2
El anhelo de Sara parecía como si nunca fuera a cumplirse. Ella esperó y esperó, y a pesar de que Dios prometió darle un hijo, todavía tenía que ver que Su promesa se hiciera realidad.
Sara tomó el asunto en sus propias manos. No sabemos si su decisión de dar a Agar, su sierva, a Abram para que diera a luz a sus hijos fue por vergüenza, miedo, incredulidad o frustración. Independientemente de su razonamiento, Sara decidió creer que su forma de hacer las cosas era mejor que la de Dios. En lugar de confiar en Su promesa y Su carácter, ella confió en su propia habilidad para controlar la situación.
Cuando estamos abrumadas por la vergüenza, podemos perder la fe en las promesas de Dios. Cuando deseamos que Dios nos dé algo (un esposo, un hijo, un trabajo, un cuerpo sano) y no le vemos responder, rápidamente podemos desanimarnos y temer que nunca nos va a dar lo que desesperadamente queremos. En lugar de dejar que la vergüenza o el miedo tomen el control, debemos elegir creer en las promesas de Dios. Puede que no nos haya prometido darnos exactamente lo que estamos pidiendo, pero ha prometido que estará con nosotras, que nos proveerá y que nos consolará en todas nuestras aflicciones. Podemos confiar en Su carácter.
Oración
Señor, ayúdame a encontrar fuerza en Ti en medio de mis luchas. Por favor, muéstrame que Tú puedes obrar maravillas en mi infertilidad en la forma específica que se manifiesta en mi vida. Dame contentamiento con lo que me has dado. Ayúdame a ver Tu gloria en todas las cosas. Amén.
Acerca de este Plan
La vergüenza con la que cargamos necesita conocer al Único que nos redimirá por completo de ella. Sea que lo aceptemos o no, el poder de la vergüenza nos afecta a todas. Busca evitar que vivamos la vida de fe que Dios ha planeado para cada una de nosotras. Y nos priva de vivir nuestro potencial, nos cubre con remordimiento, inseguridades y dudas. Dios nos puede redimir de nuestra vergüenza.
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Nos gustaría agradecer a Love God Greatly - Spanish por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://lovegodgreatly.com/spanish/