Quita El DesanimoMuestra

QUITA LA EXPECTIVA EN LAS PERSONAS

En días pasados tuve la oportunidad de platicar con un miembro de la iglesia, quien en últimos días ha estado distante referente a las actividades que en la iglesia desarrollamos. Tras varios minutos de escuchar sus razones, me pude percatar que su corazón  se dañó porque esperaba recibir de los demás congregantes, agradecimiento, reconocimiento y amistad, y al no recibirlo decidió poner tierra de por medio y ya no asistir a la iglesia ni participar en las actividades. 

Durante la plática esta persona reconoció que había visto la misericordia y el favor de Dios sobre su vida sin embargo su corazón se había desanimado y enfriado por cosas que no había recibido de personas tan imperfectas como ella misma. 

Tener expectativas altas en las personas a menudo ocasiona problemas en las relaciones, sea entre padres e hijos, matrimonios o amigos. Esto sucede cuando las personas no cumplen o no hacen lo que esperamos, o simplemente porque no recibimos de vuelta lo que hemos ofrecido.  

Esto fue lo que le sucedió a esta persona y lo más grave es que permitió que este daño afectara hasta en su relación con Dios. Si bien en lo natural pudiera justificarse su desanimo en el corazón, no fue correcto que decidiera alejarse de Dios llevando su vida espiritual a un enfriamiento. 

Muchos hacen las cosas ministeriales o seculares motivados por un oculto gusto egoísta, esperando el reconocimiento o el agradecimiento de las personas, esto no debe hacerse así. 

En Col. 3:23-24 es clara la escritura, NO PIERDAS DE VISTA que Dios es quién nos dará la recompensa de cada cosa que hagamos. Ningún reconocimiento que podamos recibir del hombre se compara al que nos dará Dios. Todo esfuerzo o cosa que hagamos debe ser bajo el principio que ¡ES POR ÉL Y PARA ÉL!

En la medida en que el motivo de nuestras acciones sea únicamente agradar a Dios y dejemos de tener la mirada en el hombre dejaremos de tener expectativas en las personas, lo que ellos hagan o dejen de hacer no afectará en nuestro ánimo.