Sal De Mi MenteMuestra

 Escrito por María, 17 años de Fort Worth, Texas, EE. UU. 

En el mundo actual, puede ser fácil ceder a la tentación. Es fácil seguir a la multitud, incluso cuando toman decisiones imprudentes que conducen a consecuencias dolorosas. Por supuesto, nuestros errores no nos definen, pero como seguidores de Jesús debemos usar nuestras vidas para mostrar cómo el amor de Dios nos ha transformado para mejor. Al aceptar la fortaleza que Dios nos da y recordar sus palabras, podemos vencer la tentación y demostrar nuestro amor por Él. Si bien podemos perdernos la felicidad temporal cuando no cedemos a la tentación, sabemos que seguir a Dios nos lleva a una vida más plena con un amor ilimitado, esperanza, gozo y paz. No importa las tentaciones que enfrentemos, somos fuertes y tenemos el poder de resistirlas con la ayuda de Dios. 

¡Esta semana, te animo a que te enfoques en superar las cosas que te tientan para que tu vida pueda mostrar la bondad de Dios y cómo Él puede obrar para transformar vidas!