El Milagro Del ArrepentimientoMuestra

"Cristo es nuestro principal fruto"

Nuestra meta como hijos de Dios, es Cristo; nuestro propósito, es Cristo.

"Le pido a Dios que el amor de ustedes desborde cada vez más y que sigan creciendo en conocimiento y entendimiento. Quiero que entiendan lo que realmente importa, a fin de que lleven una vida pura e intachable hasta el día que Cristo vuelva. Que estén siempre llenos del fruto de la salvación, es decir, el carácter justo que Jesucristo produce en su vida, porque esto traerá mucha gloria y alabanza a Dios." Filipenses 1:9-11 (NTV).

Jesús nos perdonó y nos salvó, y por su salvación nos fue concedido el Espíritu de Dios, ¿Con qué propósito? Dios no determinó entregar a su Hijo Jesús en un madero por nuestros pecados y para darnos vida eterna a fin de que siguiéramos viviendo como vivíamos sin Él. Su principal propósito fue establecernos en su voluntad para que vivamos acorde a ella y de esta manera podamos adorarlo, servirle y al mismo tiempo disfrutar de sus riquezas celestiales. Dios es Santo, Santo, Santo. Ni en Él ni en su Hijo Jesús, hay pecado. Por lo tanto, así como Jesús se hizo pecado por nuestros pecados para salvarnos, también al ser resucitado por el Padre, nosotros somos resucitados en Él para vivir como santos, porque Él es Santo.

El principal fruto que produce en nosotros la salvación, es un carácter alineado al carácter de Jesús, el Hijo de Dios. Él es nuestro sentido de vida, nuestro propósito vital. Ser conformados a su imagen es nuestro mayor galardón como hijos de Dios, porque Él es quien produce vida y justicia en nosotros, sólo en Él podemos dar gloria a Dios.