Hacia Lo DesconocidoMuestra

¡Pablo estaba en lo cierto cuando escribió este versículo! Dijo que Dios podía cambiar lo que somos cambiando la forma en que pensamos. Nuestras acciones siguen nuestros pensamientos. Y eso significa que si queremos cambiar algo sobre nuestras acciones, tenemos que empezar cambiando nuestros pensamientos. Podemos hacer esto comenzando a confiar en Dios con nuestros pensamientos. Dios quiere lo mejor para nosotros en todos los sentidos, ¡y eso incluye cada pensamiento que tenemos! 

¿Hay algún área de tu vida en la que quieras ver un cambio? Escríbelo a continuación. Escribe una oración a Dios pidiendo que te ayude a cambiar tus pensamientos sobre esa parte de tu vida primero.