Lecciones Del AscensoMuestra

Esperar no es fácil. Requiere paciencia y fortaleza. Cuando la espera se prolonga más de lo que pensamos, el cansancio se instala y crece en el vacío. El cansancio crece en nuestro corazón y afecta a nuestros ojos, impactando rápidamente en nuestra forma de ver las cosas y también, en consecuencia, en nuestra forma de comportarnos y comprometernos.

Ponte en una postura de ser fortalecido diariamente por Dios para alejar un espíritu cansado. Un corazón fuerte proviene de la práctica diaria de renovarnos con la palabra, con la oración y con los demás en comunidad.   

Recuerda que esperar no es una señal de alto. La espera nos da tiempo para construir activamente la expectativa, mientras nos enfocamos en la palabra de Dios. Al esperar, tenemos tiempo para convertirnos en las personas que Dios nos ha llamado a ser. Al esperar, nunca nos decepcionamos; si lo haces, debes saber que la espera aún no ha terminado, y que hay promesas para los que esperan. Mantén tus ojos fijos en el Señor, y no habrá lugar en tu corazón para que el cansancio eche raíces. 

PREGUNTAS 

¿Cómo puedes tomar medidas esta semana para renovar tu mente diariamente en Cristo? 

La gente a menudo piensa que mantener una relación con Dios es suficiente, pero Su palabra también dice que debemos reunirnos y confraternizar regularmente con otros creyentes. ¿Cómo puedes encontrar maneras de relacionarte de manera simple o creativa con otros creyentes durante esta temporada?