Refléjalos con respeto y honra. 

Donde vayas y donde camines siempre imagina que no te representas tu solo, como si un sello o una marca te exhibieran, recuerda que no solo te representas en individual, por tu calidad de humano es que evaluarán la autoridad y dirección de tus padres.

Antiguamente en el pueblo de Israel, quien tenía un hijo rebelde y a pesar de ser castigado no obedecía a la voz de sus padres, era llevado con los ancianos por su padre y su madre diciendo, este hijo que tenemos es rebelde, es flojo y borracho, entonces todo el pueblo lo apedreaba fuera de la puerta donde vivía, para que todo Israel lo escuchará y temiera, así quitaban el mal en Israel y nadie más quería repetir las mismas acciones del joven apedreado. Sin duda, estos parecen actos muy graves, sin embargo, la gravedad era la falta del muchacho, más no de los padres al “no honrar a sus padres y no querer acatar sus órdenes y enseñanzas”. Su mal comportamiento era borrado.

La biblia nos habla también de hijos atendiendo a la voz de sus padres, hijos que honran a sus padres con su forma de conducirse, hijos sabios y justos la escritura nos dice en Proverbios 23:24 Mucho se alegrará el padre del justo, Y el que engendran hijo sabio se gozará con él.

Pienso que la mayoría de nuestros padres nos han enseñado valores, maneras apropiadas de comportamiento y si tus padres son cristianos, te han inculcado el temor a Dios, honra a tus padres con tu comportamiento aunque ellos no estén cerca de ti, pero sobre todo honra a Dios que el te ve donde quiera que andes.

Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza. 1 Timoteo 4:12