¿Por Qué No Llegan Las Bendiciones De Dios a Mi Vida?Muestra

Acceso a las bendiciones verdaderas

¿Has notado lo maravilloso de todo lo que te rodea? ¿Has visto hoy la maravillosa obra de Dios? Hay cosas que no tienen precio y que el ser humano no puede hacer, entre ellas podemos mencionar a la naturaleza; ella existe por la obra de Dios.

La Palabra nos dice en el Libro de los Salmos 19:1 “Los cielos cuentan la gloria de Dios, Y el firmamento anuncia la obra de sus manos.” El hecho de que puedas disfrutar de tu entorno es una enorme bendición, puedes verla, sentirla, olerla...cosas que no tienen precio. Ahora bien, la mayor bendición es cuando vemos la naturaleza y sentimos paz, calma, tranquilidad, las verdaderas bendiciones de Dios muchas veces son pasadas por alto y no las apreciamos.

Siempre es bueno hacer un alto en el camino y reflexionar sobre quienes somos, donde estamos y para qué estamos aquí. Somos creación de Dios, hechos a su imagen y semejanza, redimidos a precio de Sangre y ahora hijos e hijas del Dios viviente, cubiertos por la Sangre de Cristo, rodeados por vallados de ángeles que guardan nuestros pasos, llenos del Espíritu Santo quien nos va transformando cada día a la imagen misma de Jesucristo, somos libres del pecado,  la muerte y el temor ya no se apoderará de nuestra vida porque Dios nos ha hecho salvos; en fin, recibimos miles de bendiciones que nos hacen caminar libres, seguros y confiados porque somos hechos hijos de Dios y la misma naturaleza nos revela la esencia maravillosa de nuestro Padre.

Analiza en este día las grandes bendiciones que recibiste, recibes y recibirás por parte de Dios y dale gracias porque cada una de ellas no tiene precio ni se puede comparar a nada que el mundo te pueda ofrecer; oremos: Padre bueno, Todopoderoso y Santo; nos presentamos delante de Tu Trono dándote las gracias por ese amor inefable que nos das cada día; gracias por todo lo que has creado para nuestro deleite, te pedimos que nos ayudes a ser agradecidos con todo lo que nos das y todo lo que haces en nosotros; sabemos que muchas veces hemos puesto la mirada en las cosas terrenales y hemos sido desagradecidos con todo el cuidado y amor que nos das; ayúdanos Padre para poder ver tu mano en todo lo que nos rodea, en todo lo que suceda a nuestro alrededor, sea bueno o malo porque sabemos que para los que te amamos todas las cosas nos ayudan a bien y nos hacen crecer constantemente; que tu protección, cuidado, bendición y resguardo siempre estén sobre nuestra vida; amén.