Ansiedad, Depresión Y Soledad Muestra
Bendíceme tú
Hay cinco lecciones que podemos aprender en los momentos de ansiedad, depresión y soledad por los que pasamos. Hemos visto las primeras tres lecciones: Nuestra incapacidad; aprender de las enseñanzas que Dios tiene; y que, con Dios, el fin es el principio. Hoy veremos las últimas dos lecciones:
Cuarta lección: Pide ayuda.
Hay momentos en la vida que uno dice ¡no puedo más! En esos momentos tenemos que ser sinceros y humildes para poder pedir y recibir ayuda. No hay nadie más dispuesto que nuestro buen Padre Dios para socorrernos en los momentos de angustia. El Salmo 121 dice que Dios no duerme ni se adormece. El Salmo 139 dice que Dios conoce todos nuestros problemas. Y en el Salmo 109, el rey David sabiendo que él no se puede salvar a sí mismo, pide ayuda: «Señor, mi Dios, ¡ayúdame!; por tu gran amor, ¡sálvame! ¿Qué importa que ellos me maldigan? ¡Bendíceme tú!». No seas orgulloso, pide ayuda.
Quinta lección: Ama tú.
Queremos ser amados, pertenecer, ser parte del equipo o del grupo de amigos. No queremos que nos excluyan. Pero cuando te sientes deprimido porque tus amigos se reunieron y no te invitaron, te invito a que los ames tú. Construye un «edificio» e invita a tus amigos a participar ahí. El «edificio» que otros construyeron al cual no fuiste invitado, déjalo atrás. Crea un «edificio» que no rechace a nadie, donde los demás puedan sentir el amor de Dios por medio de ti.
La Real Academia Española define la soledad como un pesar o melancolía que se siente por la ausencia o perdida de algo o alguien. La soledad es un sentimiento. Un sentido de soledad viene por no pertenecer. Cuando yo era pequeño, mi papá nos hizo participar en una liga de béisbol. Todos decían que yo era malísimo para jugar. Todos esperaban que yo fallara así que me colocaban en el campo trasero y claro, fallaba. Yo llegaba a mi casa deprimido después de esos juegos. Un día dije, Dios, ¿qué tal si yo los invito a mi equipo? Encontré que pocos se resisten al verdadero amor de Dios.
Dios tiene la medicina en tu presente. Dios te está buscando y los momentos difíciles de la vida son citas sublimes con Él donde llega a rescatarte. Puedes estar deprimido, ansioso o sentirte solo, pero recuerda tres cosas: Dios existe; Dios te ama; y Dios tiene algo bueno para ti.
Medito hoy en esto: En mi pasado, en mi presente y en mi futuro, decido ver a Dios grande (no chiquito).
Esperamos que hayas disfrutado este devocional. Te invitamos a ver este mensaje de G3:16 Polanco aquí: Ansiedad, Depresión, Soledad - G316 Polanco (subsplash.com)
Escrituras
Acerca de este Plan
Todos hemos pasado por momentos de soledad, ansiedad y angustia. Muchos hombres y mujeres en la Biblia pasaron por ahí, y Dios nos dejó esos ejemplos para que busquemos las respuestas a estas situaciones en Su Palabra. El problema con las emociones como la ansiedad, la depresión y la soledad es que les damos mucha autoridad. Cada uno debemos decidir darle la autoridad merecida a la Palabra de Dios.
More
Nos gustaría agradecer a G3:16 Polanco por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: http://g316polanco.org/