Me PreguntoMuestra

Cuando eras niño, ¿alguna vez intentaste contar las estrellas? Siempre me pareció imposible. Incluso ahora, hay algo en el cielo nocturno que inspira asombro. Este versículo de Isaías nos dice que Dios hizo todas las estrellas. No sólo eso, sino que incluso las llama por su nombre. Eso significa que el mismo Dios, que es lo suficientemente poderoso como para hacer todas las estrellas, es también lo suficientemente cercano como para tener un nombre para cada una de ellas. Lo mismo ocurre con toda la creación, incluidos nosotros.

Esta semana, tómate un momento para mirar las estrellas. Mientras lo haces, dale gracias a Dios por ser increíblemente magnífico y asombrosamente cercano. Pídele que te recuerde cada vez que mires hacia arriba que estás siendo visto y reconocido.