EPISODIO 3 ESPERANDO

DÍA UNO: LA NECESIDAD DE ESPERAR

Llegamos al tercer y último episodio de esta serie llamada Fe, y hoy es el turno de ESPERAR. En esta sería conocemos que la fe está compuesta de virtudes como creer y confiar. Ahora le añadimos la esperanza. Esta trilogía son pilares a la hora de manifestar nuestra fe. Veámoslo así, ¿cómo decir que tengo fe si no creo que Dios existe y responde en mi necesidad? ¿cómo decir que tengo fe si a pesar de creer, no confío en que Dios me ama y quiere ayudarme? Ahora bien, puedo creer y confiar en Dios y jactarme de tener fe, pero puedo no tener esperanza de ver su respuesta.

Esta es la razón de estos tres pilares de la fe, necesitamos tener esperanza, necesitamos esperar ver lo que creemos y confiamos.

Dios está más que interesado por nuestras vidas; de no ser así, piensa, ¿acaso daría la vida de su hijo unigénito Jesucristo para cargar y pagar el precio de nuestros pecados? ¿No sería más fácil dejarnos perdidos como estábamos? Eso es amor y compromiso.

Una de las barreras más grandes a la hora de recibir de Dios, es la falta de esperanza. Si no recibimos inmediatamente o de manera instantánea el milagro, abandonamos nuestra espera de recibir lo prometido. Este es el punto de partida para comenzar a vivir con el engaño “Dios no me ama” en la mente.

Dios lo ha entregado todo porque Él sí tiene esperanza en nosotros y lo manifestó diciendo “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.” (Jeremías 29:11) (RVR 1960).

Oración: Dios Padre, te agradezco por tanto amor por mi vida y perdón por no haber comprendido que la vida de Jesús, entregada por mí, fue el acto más grande de esperanza hacia mi vida. Yo hoy sigo a la espera del milagro sabiendo que tú quieres darme lo que necesito y espero. Gracias Dios, en el nombre de Jesús, amén.