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Devocional Dia 11

“Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él. Si decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no practicamos la verdad;”

‭‭1 Juan‬ ‭1:5-6‬ ‭RVR1960‬‬

A menudo las personas asocian el perdón solo con los resentimientos importantes que han estado cargando contra alguien. Pero el verdadero perdón también es para todas esas "pequeñas" heridas y ofensas que hacen que te desvíes de tu camino para evitar a alguien. Son esos recuerdos los que hacen que trates a alguien con menos calidez y amor porque te han lastimado de alguna manera.

Me refiero a cualquier actitud que tengas que no alcance la luz y el amor de Dios mismo.

Algunas personas no quieren renunciar a ese tipo de cosas. Dirán: "Amo a Dios. ¡Gloria! ¡Aleluya! Mi comunión con Él está bien. Simplemente estoy teniendo dificultades para tener compañerismo con el hermano o hermana Fulano de Tal, pero después de lo que me hizo, no puedo evitarlo.

Según la Biblia, la gente que dice cosas así está mintiendo. Están tratando de caminar en la oscuridad y la luz al mismo tiempo, El versículo dice que si caminamos en oscuridad y decimos que tenemos comunión con Dios, mentimos.

Lo triste es que muchos cristianos que caminan sin perdón no saben que están en tinieblas. Piensan que porque leen su Biblia y dicen "Amén" en la iglesia, están en comunión con Dios.

“Pero el que aborrece a su hermano está en tinieblas, y anda en tinieblas, y no sabe a dónde va, porque las tinieblas le han cegado los ojos.”

‭‭1 Juan‬ ‭2:11‬ ‭RVR1960‬‬

Una persona que no perdona odia a su hermano.

Julio "No lo odio", puedes decir, simplemente no me agrada mucho.

¿Qué tan lejos del amor tienes que ir antes de que se convierta en odio? En lo que respecta a Dios, un solo paso fuera del amor es el odio. Para Él no hay sombras de gris. A sus ojos, cualquier cosa que no sea amor es pecado.

Así que toma hoy la decisión de perdonar cada pequeña herida.

Ora y decide caminar en amor y perdonar a los demás, así como Dios te ha perdonado por amor a Cristo.