Cartas del Padre Celestial para tiMuestra

Carta para mi hijo amado: ¡Eres perdonado!

Hoy Dios te dice:

He visto tus lágrimas y tu clamor, y mi corazón se conmueve dentro de mí, hijo mío, sé que has venido con desespero y piensas mucho en ese error y en ese pecado que cometiste. Hijo mío, yo soy tu Padre que se compadece de ti (Salmo 103:13), que elimina tu pecado cuando tú te vuelves. ¿Te preguntas si eres malo? ¡No lo eres! Solo eres un hijo que aún está batallando, y que va a crecer a la medida de tu hermano mayor Jesucristo hasta vencer y vencer (Miqueas 7:18-19).

Yo no quiero que te condenes , porque yo tampoco lo hago, ya no quiero que te sientas culpable, porque tu pecado fue perdonado y también olvidado (Mateo 8:10-11).

Estás en la tierra, ¿lo recuerdas? Vas a cometer errores, vas a sentir caer, pero puedes levantarte y aprender, no me gusta que te sientas como si ya no pudieras avanzar o seguir, porque quiero que vivas en libertad y sin miedo a nada. ¡Sé feliz! (Proverbios 24:16 y Salmo 103:13-14).

Mantente firme en la libertad que tu Padre celestial te concedió, estoy contigo y te fortaleceré. Olvida tu pasado y hagamos algo nuevo (Isaías 43:18-19)

Tú eres perdonado, amado, y aprobado, aún sigues aprendiendo, aún estás entrenando, pero se que muy pronto volarás como las águilas (Isaías 40:31)

Te amo hijo mío, sigue adelante, Jesucristo llevó todo tu pecado y maldad en la cruz para que tú puedas vivir en libertad (Isaías 53:4-5).

Te amo hijo mío, en casa de tu Padre puedes volver a ser feliz, a comer en la posición de hijo y no de esclavo, de amado y no rechazado (Romanos 8:15).

Te amo hijo.