Navidad DesordenadaMuestra

Escrito por Katie, 16 años de Buford, Georgia, EE. UU.

El ángel se acercó a los pastores para contarles la buena noticia del nacimiento de Jesús. Que Él sería el Mesías. Mesías es otro término que se utiliza para decir salvador o libertador (alguien que libera a la gente). Esto significa que para las personas que esperaban a alguien que lo cambiaría todo, ¡ésto era algo MUY IMPORTANTE! Y lo que es aún más asombroso es que los ángeles invitaron a los pastores (que pasaban la mayor parte de su tiempo en los campos con las ovejas, y no a gente con un estatus superior) a que fueran a verlo.

Piensa en ello de esta manera: Si Dios te dijera que fueras a ver el nacimiento de tu celebridad favorita y nadie más supiera que con el tiempo sería súper famosa, excepto tú y sus padres, sería genial, ¿no? Tal vez, el hecho de saber algo importante haría que quisieras contárselo a todo el mundo ¡aún más! Bueno, eso es exactamente lo que hicieron esos pastores. Tan pronto como escucharon las buenas nuevas de Jesús, fueron a contárselo a todos los que conocían y a los que se encontraban (Lucas 2:17).

Podemos hacer lo mismo con las buenas nuevas de Jesús. Podemos sentirnos entusiasmados por contarle a la gente sobre Jesús porque Él cambió las cosas para todos. La buena noticia es que Jesús no sólo vino a hacerse famoso, sino que vino para que pudiéramos ser perdonados y para mostrarnos cómo vivir la mejor vida posible.

Ahora que ha llegado la Navidad, piensa a quién puedes contarle sobre Jesús. Considera la posibilidad de compartir las buenas nuevas de Jesús con otra persona (alguien con quien tengas una buena relación) con la esperanza de que eventualmente se relacionen con Él y descubran la alegría que celebramos en la temporada navideña.