arruina TU vidaMuestra

Deja que Dios arruine TU vida. Así, te dará la suya y encontrarás LA vida.

Porque la vida sin Dios carece de sentido. Vas a encontrar el sentido de tu vida, cuando la entregues por completo a tu creador.

¿Cómo es la vida de Dios? ¿Cómo es esa vida que solo Él puede darnos?

Es una vida:

1. Abundante
2. Altruista
3. Eterna

Ya hemos desarrollado la vida abundante y altruista que encontramos en el Señor, pero la vida más importante que encontramos en Él, es la eterna.

Dios plantó eternidad en nuestros corazones. Tienes un instinto que anhela la inmortalidad. La razón de esto es que Dios te hizo para vivir eternamente.

Tu relación con Dios en la tierra determinará el tipo de relación que tendrás con Él en la eternidad.

Cuando vives a la luz de la eternidad, tus valores cambian y eso te da la pauta de cómo manejar toda relación, tarea y circunstancia.

¿Cómo será la eternidad con Dios? Nuestra capacidad mental no puede imaginar completamente toda la maravilla y grandeza celestial.

Ahora bien, Dios nos dio algunos detalles de la eternidad en Su Palabra.

Sabemos que ahora nos está preparando un hogar eterno para nosotros. Que nos volveremos a encontrar en el cielo con los seres queridos que eran creyentes, seremos libres de todo dolor y sufrimiento, recompensados por nuestra fidelidad en la tierra y reasignados para trabajar en algo grande.

Disfrutaremos de una relación completa con Dios, y a la vez, Él disfrutará de nosotros por siempre, sin límites y sin fin.

C.S. Lewis plasmó el concepto de eternidad en las últimas páginas de su serie de ficción “Las Crónicas de Narnia” para nosotros:

“Para nosotros, este es el fin de todas las historias… más para ellos fue el comienzo de la verdadera historia. La vida de ellos en este mundo… ha sido tan solo el título y la portada: y ahora por fin comenzará el primer capítulo de la gran historia que nadie ha leído en la tierra y continuará por siempre, y cada capítulo es mejor que el anterior”.

Solo un necio puede andar por la vida sin prepararse para lo que todos sabemos que un día ocurrirá. Debes pensar más en la eternidad y no menos. Por esto mismo, es tan importante una visión clara de la misma.

Jesús no nos envió a clamar en habitaciones por Su regreso. Nos dejó una única comisión, y esa es: IR Y PREDICAR. Porque cuando hayamos cumplido con esto, Él volverá.

Este mundo no es tu hogar eterno, no te acomodes tanto a él. No complazcas tu ego a expensas de tu alma.

Sueño con verte cumplir el propósito de Dios. Y el mayor atributo para cumplirlo y dejar que Dios se adueñe de tu vida, es FE.

Te desafío para que en los días que vienen puedas preguntarte lo siguiente:

¿Qué puedo hacer para recordar que la vida consiste en vivirla para Dios y no para mí mismo?

Dios te bendiga.