Una Prueba de Gloria

Ayer hablábamos de las pruebas, y sobre cómo Dios obra en nuestras vidas a través de ellas.

Hay momentos en los que a todos nos toca pasar por pruebas de fuego. Hay personas que, de hecho, han tenido que pasar literalmente por pruebas de fuego.

Ese fue el caso de Sadrac, Mesac y Abed-Nego, cuando tuvieron que comparecer delante de Nabucodonosor. Al negarse a adorar al rey, fueron arrojados al horno de fuego 7 veces más caliente que lo habitual.

Y en medio de ese fuego, vieron el milagro de Dios más grande de sus vidas:

• No solo dice la Biblia que "paseaban en medio del fuego sin sufrir ningún daño" (Daniel 3:25)
• Sino que se les unió Jesús en ese paseo
• Y ni sus ropas tenían olor al humo terrible de ese horno.

¡Es tan impresionante! Sí, las pruebas son una gran oportunidad para ver la gloria de Dios. Pero para ello, tenemos que actuar por fe, y dar pasos valientes, como el que ellos dieron.

Querido/a amigo/a, que tu fuego apasionado por Dios apague los fuegos de la prueba a tu alrededor.

En medio de la prueba en la que te encuentres, da hoy un paso de fe. Hasta que no salgamos de la barca y pongamos nuestro pie en el agua, como Pedro, no podremos caminar sobre el mar, ni experimentar milagros increíbles de Dios (Mateo 14:29).

¡Eres un Milagro!

Christian Misch