Grandeza continuaMuestra

¿Tienes un plan?

Cuando queremos servir al Señor, cuando queremos hacer algo grande por Él y ayudar a edificar su Reino, ¿cómo pasamos del «quiero» al «cómo»? Muchas veces, como creyentes en Cristo, queremos hacer cosas para el Señor, pero no sabemos cómo hacerlas.

David tenía un plan. Dedicó muchos años de su vida a preparar la construcción del Templo del Señor. Recogió oro, plata, bronce, hierro y mucho más en todas sus batallas durante su época como rey de Israel, a fin de estar preparado para cuando llegara el momento de construir el Templo. Tenía el «querer» y también el «cómo».

Como creyentes en Cristo, nuestro «sí» más profundo, más grande y más satisfactorio es formar parte de la construcción del Reino de Dios. ¿Cómo vamos a hacerlo? Mira todo lo que Dios ya nos ha dado. Nos ha dado la Palabra de Dios escrita, un corazón para que adoremos a Dios, dones espirituales y muchos recursos. Nos ha brindado un trabajo, una casa en la cual vivir, un coche que conducir, comida para comer y dinero para gastar. Él nos ha proporcionado todas estas cosas.

¿Tienes un plan como David? Un plan es cuando un «quiero» tiene un «cómo». David tenía un plan. En 2 Samuel 7 vemos cómo ganó muchas batallas y reunió el oro, la plata, las joyas y piedras costosas. Luego, en 2 Samuel 8, le dicen que no será él quien construya el Templo. Así que guardó todo lo que había ganado hasta el momento oportuno; ése era su «cómo». Cuando se terminó el Templo, no se llamó Templo de David, sino Templo de Salomón. David tenía un plan y proveyó para algo que nunca llegaría a ver, pero lo hizo con un corazón alegre porque era para el Señor.

Queremos ser creyentes que ayuden a proveer para asientos en los que nunca nos sentaremos, para misioneros que nunca conoceremos, para iglesias que ayudamos a plantar a las que nunca iremos, y para las cosas que Dios hace y en las que quizás nunca estaremos actuando en forma personal. Queremos ser creyentes así por el corazón de Dios que hay en nosotros.

Hagamos todas estas cosas para que podamos ver llegar más lejos el reino de Dios. Será nuestro legado en lo que Dios está haciendo.