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Provisión divina: La familia

La familia es un grupo de personas relacionadas entre sí por parentesco de sangre o legal.

¿Es la familia una provisión divina? Adán y Eva fueron los primeros habitantes de la tierra; formaron una familia, Dios los bendijo y ellos fructificaron y multiplicaron la tierra. La primera familia fue una provisión divina de parte de Dios.

Quiero mencionarte tres enseñanzas de esta provisión:

#1 Honremos a padre y a madre:

La provisión de Dios viene acompañada de instrucciones. Uno de los diez mandamientos que se dieron a Moisés en el Antiguo Testamento habla directamente de la relación que existe entre padres e hijos: “Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da”.

La provisión viene con instrucción y la instrucción viene con una promesa.

#2 Importancia del matrimonio:

El matrimonio es parte del plan y propósito de Dios, no es bueno que el hombre (o mujer) estén solos, por eso nos provee con una hermosa pareja al lado, es parte de Su provisión. El matrimonio es el plan de Dios para la familia sí y amén.

#3 Cuidar a nuestra familia:

Es nuestro deber como padres, hijos, nietos o abuelos cuidar nuestra familia. Lo que no cuidas se puede destruir. Cuida en amor, tolerancia, paciencia a toda tu familia. No sabes si el día de mañana no estarán con nosotros. A pesar de errores o imperfecciones, cuida y valora esta provisión de Dios.

No en todas las familias hay perfección. Mira esta lista de familias imperfectas:

José fue vendido por sus hermanos.

Jacob se robó la bendición de Esaú.

Ananías y Safira le mintieron al Espíritu Santo.

Los hijos de Elí tenían mucha maldad.

Isaí menospreció a David.

Abraham ocultó a su esposa diciendo que era hermana.

Caín mató a su hermano.

Amón violó a su hermana.

¿Qué quiero decir con todo esto? No hay familias perfectas, pero indiscutiblemente la familia es parte del plan de Dios, es la provisión, y todos estos ejemplos son advertencias de lo que nosotros no debemos hacer en nuestra familia. Seamos obedientes, seamos cuidadosos, amemos a nuestra familia. El enemigo desde, tiempos inmemorables, quiere atacar a las familias porque sabe que la familia es una provisión divina; es un regalo de Dios para nosotros.