Juzga el Camino de JesúsEjemplo

Juzgar a la manera de Jesús (Parte 5)

La gracia hace que tu próximo juicio sea grandioso. El día del juicio, a pesar de su larga espera, todavía está en camino. Pero la idea de estar frente al Jesús Omnisciente y perfectamente justo no tiene por qué ponerte nervioso o ansioso. Porque la gracia de Dios hace grande tu juicio.

La gracia es el amor inmerecido de Dios, el amor que mostró por ti cuando envió a Jesús a esta tierra. Jesús vino a este mundo señalando con el dedo e hizo lo impensable. Él eligió ser juzgado. "Todos perderemos el rumbo, como ovejas, y cada uno tomará su propio camino; pero el Señor descargará sobre él todo el peso de nuestros pecados..." (Isaías 53:6,8). Jesús siendo juzgado en tu lugar es lo que hará que tu día del juicio sea grandioso.

En Su día del juicio (Viernes Santo), Jesús fue llamado con nombres horribles: mentiroso, blasfemo, pecador. En tu día del juicio, Dios te llamará hermosos nombres: hijo, hija, santo. En Su día del juicio, Jesús fue acusado de pecados que no cometió. En tu día del juicio, Dios no te acusará de los pecados que cometiste. En Su día del juicio, Jesús fue sentenciado a muerte. En tu día del juicio, se te prometerá una vida que nunca termina.

Juzgar a la manera de Jesús no solo significa enfocarnos en nosotros mismos y en nuestras iglesias. También significa enfocarse en la gracia, el amor que hará grande el día del juicio.

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