Devocional Del Día | JulioMuestra

Ofrendas a Dios

1 crónicas 29:14-16

Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos. Porque nosotros, extranjeros y advenedizos somos delante de ti, como todos nuestros padres; y nuestros días sobre la tierra, cual sombra que no dura. Oh Jehová Dios nuestro, toda esta abundancia que hemos preparado para edificar casa a tu santo nombre, de tu mano es, y todo es tuyo.

Estas hermosas palabras son parte de la oración de David mientras está preparando una ofrenda para la construcción del templo de Dios. Esto me habla de que, aunque David estaba dándose, él entiende que todo le pertenece al Señor. No hay nada que David pueda darle que no pertenezca a Dios.

De igual manera cuando nosotros le demos a Dios, debemos de recordar constantemente que, aunque le demos todo, no le estamos haciendo un favor a Dios. Al contrario, nosotros somos los que tenemos la dicha de poder darle de lo que ya es de Él.

Nosotros solamente somos administradores de sus bienes. Esto inicia cuando entendemos la grandeza y el poder de Dios.

Porque entendemos la capacidad de Dios y nuestro lugar como hombres.

Medita: ¿Cuál es mi corazón al ofrendarle a Dios?