Venciendo EnemigosMuestra

La ansiedad y la depresión

Hoy día nuestra sociedad es atacada por dos males, la ansiedad y la depresión, el día a día, las exigencias de la sociedad, las caretas falsas detrás de Facebook, los estándares de moda y la demanda de tener lo último en tecnología ha venido a poner mucha exigencia en el ser humano de hoy.

Todas estas cosas han venido a ser un ataque crucial a las nuevas generaciones, que buscan llegar a los estándares que la sociedad hoy les exige, sin embargo, todas estas exigencias han provocado sentimientos de ansiedad, soledad, tristeza y depresión en mucha gente.

Cuánta gente no vive hoy ansiosa por generar más dinero, por cubrir muchas actividades en trabajo, casa y relaciones sociales; hasta llegar a los excesos, que generan en el ser humano ansiedad.

¿Qué es la ansiedad?

La ansiedad es un estado emocional cuando una persona expresa tener un síntoma que en realidad no tiene, se manifiesta con mareos, taquicardia, sudoración, palpitaciones, temblor, etc.

Una persona ansiosa se siente nerviosa, con deseo de huir, sensación de muerte inminente, inquietud, miedos irracionales, temor a perder la razón y el control.

La ansiedad tiende a producir distorsiones de la percepción de la realidad, del entorno y de la persona misma, lo que afecta la funcionalidad del individuo.

¿Qué es la depresión?

La depresión se puede describir como el hecho de sentirse triste, melancólico, infeliz, abatido o derrumbado. La mayoría de nosotros se ha sentido de esta manera de vez en cuando durante períodos cortos.

La depresión clínica es un trastorno del estado anímico en el cual los sentimientos de tristeza, pérdida, ira o frustración interfieren con la vida diaria durante un período de 2 semanas o más, llevándolo al aislamiento y algunas veces a desear morir.

¿Pero que dice la Biblia al respecto?

Aunque estos dos angustiadores del ser humano son reales, debemos pedirle a Dios la ayuda, cuidemos nuestra vida, emociones, sentimientos y corazón. Dios ya nos ha dado la victoria sobre todas las cosas… Jesús nos prometió en su palabra que saldríamos adelante a pesar de que la vida nos trajera aflicciones.

"Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo"(Juan 16:33).

Esta Escritura nos dice que en el mundo tendremos aflicción (abatimiento, tristeza, frustración) Pero, ¡qué confiemos, Jesús ya ha vencido al mundo!

Solo en Jesús podremos tener paz y pasar de un estado de desánimo, desesperación o tristeza a un estado de paz.

"La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo" (Juan 13:31).

¿Está alguno entre vosotros afligido? Haga oración. ¿Está alguno alegre? Cante alabanzas (Santiago 5:13).

La oración nos acerca al Padre, a Él podemos expresarle nuestro dolor, nuestra angustia, nuestra ansiedad, segura estoy que él te ayudará y quitará lo que esté aquejando tu corazón, y no solo eso, te dará la salida a tu necesidad. ¡Ora a Dios cuando tengas momentos difíciles en tu vida!

"Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo; 7 echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros. 8 Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; 9 al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo. 10 Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca" (1 Pedro 5:6-10).

Dios no espera que nos quedemos en el hoyo, en el problema, en la aflicción, dice la Escritura que después de padecer un poco; el Señor mismo nos perfeccionará, afirmará, fortalecerá y establecerá, no podremos levantarnos igual de un problema, con la ayuda de Dios seremos más fuertes espiritualmente y el enemigo no podrá vencernos como Él quiere, segura estoy que la siguiente vez que te encuentres en un estado así, sabrás salir adelante con mayor facilidad, ¡pues conoces de dónde viene tu fuerza!