Respuestas Para El Hombre ModernoMuestra

“Responsabilidad de la iglesia de Cristo”

La mentalidad escapista de la iglesia no le permite involucrarse en traer la calidad de vida que la sociedad está reclamando, debido a que su teología los ha secuestrado. La distorsión escatológica los tiene convencidos que como el mundo se va a acabar, para qué arreglarlo. Pero la mentalidad de reino, es diferente, nos hace  responsables de extender en cada país, cada región, cada continente, el reino de Dios; establecer su cultura, manifestar a Cristo, ser la esperanza para una humanidad sin esperanza.

El movimiento actual de Dios, es finalmente llevar a la iglesia a una restauración de la cultura bíblica, que en la verdad presente encarne el mensaje del Reino de Dios para ejercer influencia y sojuzgar la tierra, pues Cristo comisionó a su iglesia para ordenar el mundo y no adornar el mundo. 

Las características de la cristianización, deben ser propias de nuestra ciudad y nación, y aunque no puede desligarse de las verdades bíblicas, no puede estar reproduciendo lo que es irrelevante a nuestra cultura, sino que, la Palabra de Dios es la que genera y ordena la evangelización a la manera propia de cada cultura y nos lleva a una práctica del Reino de Dios en  sus propias realidades.

Esto, nos hace ser creativos en la contextualización, sabiendo manejar la cultura del Reino y crear una práctica consecuente con nuestra cultura e idiosincrasia del país maravilloso en que Dios nos hizo nacer y vivir, para evangelizarlo para la gloria de Dios y transformarlo como evidencia de la realidad del Reino de Dios en la historia humana.

¿Estás dispuesto a ser parte de este movimiento de cristianización a nivel mundial? Te invito a ser parte activa de este accionar, tu vida, tus palabras y decisiones, deben reflejar este reino, para que puedas modelar a otros a ese Cristo que tanto necesitan. No dejes pasar esta semana sin usar la creatividad dada por el Padre para extender el reino de Dios con quienes te rodean.

Oremos: Padre te agradecemos por la creatividad que nos has dado para contextualizar la evangelización de manera apropiada. Tu sabiduría nos lleva a una práctica de reino en nuestras realidades. Te doy gracias por mi país, su gente; por tu amor para cada uno de ellos y la oportunidad que tengo para mostrarles el reino de Dios y su justicia.  Amén.