Las 4 Estaciones Del Año en Nuestra VidaMuestra

El otoño para renovarnos

En el otoño las hojas de los árboles cambian su color verde por tonos ocres, hasta que se secan y caen. Eso significa que viene el tiempo de renovación. Como hijos de Dios debemos dejar que algunas cosas viejas se desprendan de nuestra vida, para que cosas nuevas tengan su entrada.

Nuevas experiencias, nuevos ministerios, nuevos propósitos y metas. Una temporada para recibir una nueva unción y renovación de parte del Señor. Un tiempo que a través de su Palabra recibiremos nuevas fuerzas para continuar.

Por tanto no desfallecemos, antes bien, aunque nuestro hombre exterior va decayendo, sin embargo nuestro hombre interior se renueva de día en día (2 Corintios 4:16). Y no os adaptéis a este mundo, sino transformaos mediante la renovación de vuestra mente, para que verifiquéis cuál es la voluntad de Dios: lo que es bueno, aceptable y perfecto (Romanos 12:2).

Así como la naturaleza se renueva en todos los aspectos, también nosotros debemos renovarnos. El águila es un animal que nos enseña una gran lección, se refugia en un lugar seguro y allí se saca las plumas, el pico y las uñas. Y luego espera que le crezcan sus nuevas plumas, su nuevo pico y sus nuevas uñas.

Somos como el otoño, nos desprendemos y nos renovamos para ser de bendición y cumplir el propósito para lo cual fuimos creados.